El analista Carlos Elizondo Mayer-Serra, profesor del Tecnológico de Monterrey, señaló que Estados Unidos mantiene una postura de presión sobre México en temas clave como seguridad, migración y el combate al tráfico de fentanilo. En su análisis, destacó que esta estrategia no es exclusiva para México, sino parte de una política general de la administración estadounidense.
- Según Carlos Elizondo, la presión de Estados Unidos no debe tomarse como un ataque exclusivo a México, pues ha sido una estrategia aplicada también a otros países como Canadá y Ucrania. En el caso mexicano, esta presión se ha centrado en la lucha contra el tráfico de fentanilo, el control de la migración y el combate al crimen organizado.
Uno de los puntos clave mencionados por Elizondo Mayer-Serra es la notable reducción en el tráfico de fentanilo, lo que demuestra que el gobierno mexicano sí tenía la capacidad de frenar esta actividad, pero en administraciones anteriores no se tomaron medidas efectivas, incluyendo la administración de AMLO
Migración y seguridad: el otro eje de presión estadounidense
En su análisis, Carlos Elizondo enfatizó que la disminución en el cruce de migrantes ha sido otro factor relevante para Estados Unidos, que ahora busca saber por qué en el pasado no se aplicaron las mismas estrategias.
- Además, mencionó que la entrega de 29 capos del narcotráfico a Estados Unidos ha sido interpretada como un intento del gobierno mexicano por suavizar la relación bilateral. Sin embargo, tanto el gobierno de Joe Biden como la oposición liderada por Donald Trump han expresado que la lucha contra el crimen organizado debe incluir también la investigación de posibles vínculos con actores políticos.
Aranceles y comercio: una nueva fase de presión
Carlos Elizondo también abordó el tema de los aranceles recíprocos, que entrarán en vigor el 2 de abril. Explicó que estos forman parte de una estrategia comercial de Estados Unidos para equilibrar su relación con distintos países. En el caso del T-MEC, la situación es más compleja, ya que los aranceles deben ser iguales para todos los socios, pero aún existen barreras no arancelarias que podrían generar nuevas tensiones.
- Uno de los puntos de fricción en el tratado es el sector energético, pues Estados Unidos ha señalado que la reforma eléctrica en México favorece a Pemex y CFE, lo que afectaría a las inversiones extranjeras.
México bajo la lupa por crimen organizado
Finalmente, Carlos Elizondo destacó que el gobierno de Estados Unidos ha dejado en claro que no tolerará la operación de cárteles en México ni sus posibles vínculos con actores políticos. Según el analista, este tema de seguridad podría generar nuevas tensiones en los próximos meses./Agencias-PUNTOporPUNTO
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