Con el retiro de Estados Unidos -por segunda ocasión- del Acuerdo de París sobre cambio climático, se observarán un “retraso en el cambio tecnológico y la transición a cero emisiones durante el mandato de Donald Trump”, aunque las empresas armadoras que operan en México afirman que mantendrán sus planes de fabricación de autos eléctricos conforme la demanda de los consumidores.
- Como lo prometió en campaña, en su primer día de mandato, Trump firmó la orden ejecutiva para retirar a Estados Unidos del Acuerdo de París, del que se derivaban diferentes medidas para la reducción de gases de efecto invernadero.
Entre ellas, la meta de que para el 2030, al menos 50% de las ventas de vehículos automotores en territorio estadounidense consistan en unidades electrificadas.
“Vamos a acabar con ese mandato del vehículo eléctrico para volver a salvar a los trabajadores del sector automovilístico de nuestro país. En otras palabras, van a poder comprar el coche que quieran. Vamos a construir coches aquí en los Estados Unidos a un ritmo que nadie podría imaginar hace unos años”, dijo Donald Trump en su primer discurso en el Capitolio tras su juramentación para un segundo mandato.
- Sin embargo, el mandatario no informó todavía sobre la posible eliminación de los subsidios a la compra de vehículos eléctricos que promovió el expresidente Joe Biden en el 2022, ni sobre los incentivos para la promover la fabricación de baterías y semiconductores en territorio estadounidense.
- La medida de revertir la participación de Estados Unidos en materia ambiental provocará “un retraso en el cambio tecnológico en Estados Unidos y en México, porque ya no se tiene la urgencia; las armadoras (de vehículos) que se encuentran en Estados Unidos y en México ya no tendrán esa prisa por aumentar su producción de vehículos eléctricos” y eso pudieran impactar en la producción desde México, sostuvo Alberto Bustamante, director general de la Agencia Nacional de Proveedores del Sector Automotriz (Anapsa).
Explicó a El Economista que la salida de Estados Unidos del acuerdo contra el cambio climático ya no obligará a las automotrices a acelerar la transición a cero emisiones, y relaja la política que las obligaba a fabricar y comercializar 50% de su producción autos eléctricos hacia el 2030, pero descartó que la medida impacte de manera significativa los planes de las armadoras de Estados Unidos y las que operan en México.
- Expuso que estas se regirán conforme a la oferta y demanda en ambos países, donde el consumidor gusta por este tipo de unidades, por lo que los proyectos para aumentar la producción de autos eléctricos en México seguirán en ascenso, en tanto los consumidores estadounidense lo sigan demandando.
- Al respecto, General Motors (GM), la mayor fabricante y exportadora de autos en México y el segundo vendedor en Estados Unidos de autos eléctricos ha confirmado que continuará el camino de fabricar y comercializar unidades eléctricas, conforme a la demanda del consumidor.
GM realizó en México millonarias inversiones de mediano y largo plazo para reconvertir sus plantas en el país y en Estados Unidos para la fabricación de vehículos eléctricos (EV), tan es así que este año anunciará varios proyectos de ensamble de nuevos modelos que saldrán al mercado.
La automotriz estadounidense arrancará la producción de Cadillac Optiq EV en México y Cadillac Escalade IQ (en Estados Unidos). Actualmente, la empresa fabrica en su planta de Ramos Arizpe, Coahuila, las versiones eléctricas de sus camionetas Equinox y Blazer.
Mientras que Stellantis también confirmó nuevas inversiones en México para transitar a la fabricación de autos verdes, con la expectativa de que las ventas irán en ascenso, tanto en Estados Unidos como México.
Tesla, afectada
De acuerdo con especialistas del sector automotriz, Tesla, del magnate Elon Musk, quien es asesor del presidente Trump, tendría la mayor afectación como fabricante y comercializador de autos eléctricos en ese país, en caso de que se eliminen algunos incentivos a la compra y fabricación de vehículos.
- Durante su campaña electoral, Trump amagó con eliminar el crédito fiscal de 7,500 dólares que actualmente ofrece el gobierno de Estados Unidos a los ciudadanos para que compren autos eléctricos.
- Ignacio Martínez, Coordinador del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios de la UNAM, expuso que Trump amenaza con retomar un agresivo nacionalismo económico, aplicar un férreo proteccionismo comercial, y una política exterior muy conservadora contra México.
Aunque confió en que las inversiones automotrices continuarán con sus planes de electrificación, pues el periodo de mandato de Trump es de cuatro años, en cambio, las inversiones son de largo plazo, quizá en algunas lo prolongarán./Agencias-PUNTOporPUNTO