AGENCIAS
Unos 70 maestros mexicanos de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) destruyeron las oficinas del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el sureño estado de Oaxaca, dijo hoy a Efe un portavoz de la fuerza política.
«Arremetieron contra las oficinas, derribaron el portón de entrada con una camioneta, rompieron ventanas, muebles y arrancaron de tajo toda la red telefónica, por eso estamos incomunicados», detalló el titular de Comunicación del PRI estatal, Rodolfo Romero.
Los miembros de la CNTE, armados con palos y piedras, atacaron el jueves la oficina del presidente estatal y dejaron pintas en las paredes acusando de traidores a los miembros de esa formación política.
Asimismo, los maestros destrozaron las oficinas del senador Eviel Pérez Magaña y del diputado federal Samuel Gurrión.
Romero explicó que después de los actos de vandalismo, el PRI presentó una denuncia de los hechos ante la fiscalía estatal, que abrió una investigación.
«No hemos cuantificado los daños, pero son considerables, y esperamos que el Ministerio Público proceda contra los responsables», indicó.
Unos 500 maestros de la sección 22 de la CNTE realizaron este jueves una marcha en contra de la reforma educativa promulgada en 2013, que les obliga a someterse a exámenes de evaluación y elimina privilegios que tuvieron durante muchos años.
La fuente dijo que un grupo de manifestantes bloqueó una calle para impedir el paso de vehículos, mientras que otro, menos numeroso, ingresó a las oficinas del PRI -que habían sido desalojadas- y causó los destrozos.
En un comunicado, el PRI estatal condenó la agresión y destacó que «ningún acto violento podrá hacer prevalecer los derechos que se reclaman».
La dirección nacional del PRI también expresó su «más enérgica condena» a estos actos de violencia, mientras que el Gobierno de Oaxaca pidió a los maestros detener sus agresiones contra la sociedad, las instituciones y el Estado de derecho.
La CNTE ha protagonizado numerosas protestas para exigir la derogación de la reforma educativa impulsada por el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, que busca recuperar la rectoría del Estado en ese sector tras décadas bajo control de los sindicatos.
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