Las petroleras privadas avanzaron de a poco en el aumento de la producción de petróleo ante la llamada del régimen obradorista que había prometido retomar las rondas si es que éstas daban buenos resultados. Pero las compañías no han logrado las cifras prometidas.
Así, las petroleras tocaron su punto máximo en septiembre del 2022 con 113,000 barriles diarios. Pero ya, para mayo pasado –el último dato disponible– la cifra ha caído a poco más de 84,000 barriles, el número más bajo desde abril de 2023.
- Las razones detrás de la baja son varias, dicen fuentes y consultores entrevistados. Una fuente cercana a una de las petroleras, que ha pedido el anonimato, explica que la caída se ha debido de alguna manera al mal manejo de algunas compañías, pero la mayor parte a los retrasos de pagos de la estatal Pemex.
Algunas petroleras venden su petróleo a la estatal para que ésta lo comercialice
- Estas mismas empresas privadas han tenido retrasos en sus pagos de hasta tres meses que les impiden a las empresas continuar financieramente con sus operaciones, dice otra fuente que trabajó en la Comisión Nacional de Hidrocarburos y que pidió no ser citada.
“La verdad, hoy en día, el ecosistema no está funcionando bien en México. Una cosa es todo lo que López Obrador ha dicho, él insiste que sigue respetando los contratos, pero niega la complejidad del sector upstream. Entonces hay muchas cosas. Una cosa que definitivamente ha tenido un impacto muy fuerte son las finanzas de Pemex, esto ha afectado a varios de los socios y a todos quienes venden su producto a Pemex”, dice John Padilla, un consultor de la industria y director de IPD Latinoamérica.
- Algunas compañías, como Fieldwood –que fue comprada por la rusa Lukoil y ahora es socia de PetroBal, comprada por Grupo Carso– y la italiana ENI han reducido de manera importante su producción.
- El campo Ichalkil, operado por Fieldwood, ha reducido su producción de manera relevante. En agosto de 2022 cifró 14,519 barriles diarios y en mayo pasado recién produjo 2,941 barriles diarios.
- Amoca, de ENI, es otro ejemplo. En abril de 2023 logró su pico de producción de 20,082 barriles diarios. Ya para este mayo se ha reducido casi a la mitad con 10,997 barriles de petróleo al día.
“Las empresas no es que sean exactamente las responsables, obviamente ellas no quieren fallar, pero pasan diferentes cosas. La producción también se dilató mucho con los tiempos de descubrimientos y de desarrollo, pero tampoco han logrado mantener la producción”, dice Andrés Armijos de la consultora Welligence.
La Asociación mexicana de empresas de hidrocarburos (Amexhi) fue consultada, pero no ofreció comentarios de inmediato.
- El gobierno mexicano tampoco ha lanzado nuevas licitaciones para mantener o aumentar la producción de crudo. Y los campos promesa de industria privada, Trión y Zama, aún no tienen una fecha exacta para comenzar con la producción de petróleo.
Privadas se rezagaron en la producción de hidrocarburos
Las petroleras privadas no han logrado cumplir con sus metas de producción y en 2023 esta variable rompió con una racha que encaminaba la extracción de crudo al alza e incluso la cifra se situó en los últimos meses por debajo de los 100,000 barriles diarios.
- Las compañías que se hicieron de un contrato con la reforma energética tenían como objetivo para este 2023 producir alrededor de 214,000 barriles diarios, según las cifras de la Asociación Mexicana de Hidrocarburos (Amexhi). Pero en el año, con datos de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) hasta noviembre pasado, la producción diaria se promedió en 102,000 barriles.
- En noviembre, incluso, esta se situó en poco más de 95,000 barriles al día. Se trata del número más bajo desde julio del año pasado, dos meses después de que se anunció que las compañías habían rebasado la barrera de 100,000 unidades.
Así, las compañías se alejan de la meta establecida desde el gobierno federal para el fin del sexenio, de 280,000 barriles diarios de producción resultantes de los contratos otorgados con el cambio constitucional de 2013.
- Las petroleras han sido criticadas de manera recurrente desde la presidencia por dar resultados –en términos de producción– menores a los esperados. Esto llevó al gobierno morenista a cancelar el resto de licitaciones planteadas como parte de la reforma y a cesar, al menos al inicio del sexenio, con nuevos ejercicios de asociación con la estatal Pemex.
El presidente López Obrador ha medido el éxito de las compañías en barriles y los resultados se han estancado.
- En un análisis a los datos del regulador, la baja en la cifra de producción se debe principalmente a una disminución en la aportación de los tres principales jugadores privados del mercado: la italiana ENI, Fieldwood y Hokchi. Las tres petroleras engloban alrededor del 50% de la producción y las tres también han registrado bajas relevantes en sus niveles de extracción de crudo durante el segundo semestre del año.
El caso más significativo es de la petrolera Fieldwood que opera los campos petroleros Ichalkil y Pokoch. La producción de estos dos activos se ha reducido en casi el 50% desde su pico de producción, registrado en agosto del 2022.
En este último mes esta cifra fue de 23,115 barriles diarios. En noviembre pasado, esta se redujo hasta 12,073 barriles por día. Se trata del número más bajo desde diciembre de 2021, cuando la compañía aún no rompía el piso de las 10,000 unidades.
Grupo Carso, del empresario Carlos Slim, anunció recientemente la adquisición de participación en estos dos campos, con la compra de Petrobal, la petrolera de Grupo Bal y socia financiera de Fieldwood en ambos proyectos.
- La italiana ENI –el segundo participante con más volumen en el mercado después de la estatal Pemex– también ha visto disminuciones importantes en los últimos meses. La petrolera, que opera los campos Amoza, Miztón y Tecoalli– finalizó noviembre con una producción de 23,220 barriles diarios.
En julio de este año había logrado elevar esta cifra a 34,934 barriles.
- Las compañías fueron consultadas, pero no hicieron comentarios. Lo reportado por las petroleras privadas significa alrededor del 5% de la producción nacional de crudo. Las petroleras lograron su cifra máxima en septiembre de 2022, cuando reportaron las extracción de 113,565 barriles diarios.
El sector privado espera la entrada en marcha de los activos Zama y Trión para incrementar de manera significativa sus cifras. Pero esto llegará hasta la próxima administración presidencial.
Deuda con proveedores y privados amenaza la producción
La abultada deuda de la empresa estatal mexicana Pemex con sus proveedores de servicios petroleros y productores privados de crudo y gas ha llegado a una situación crítica que amenaza la producción de hidrocarburos, la inversión e, incluso, la supervivencia de empresas, alertaron agrupaciones locales del sector.
- Con una deuda financiera de más de 105,000 millones de dólares, la gigante estatal debía también a sus proveedores unos 297,000 millones de pesos (unos 17,220 millones de dólares) al cierre de septiembre, según sus propios datos.
En una conferencia con analistas sobre su resultados, en octubre, dijo que el monto era cuantioso porque incluía muchos rubros, pero no precisó.
La asociación que agrupa a empresas privadas y extranjeras de hidrocarburos en México, Amexhi, alertó al Gobierno en una misiva que la falta de pago de Pemex amenaza la continuidad de actividades petroleras, las metas de producción, así como la viabilidad financiera de proyectos de extracción ya en marcha.
- La Amexhi externó su preocupación sobre la «situación crítica» que está generando la enorme deuda de la estatal en la industria petrolera en México en una carta enviada a los secretarios de Energía, Miguel Ángel Maciel, y de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, esta semana, de la que Reuters obtuvo una copia.
- El llamado de Amexhi a resolver pronto el problema se sumó al de la asociación que agrupa a empresas de servicios petroleros, AMESPAC, entre cuyos miembros están SLB, antes llamada Schlumberger, así como Halliburton y Baker Hughes y que esta semana pidió a Pemex abonar el pago de varios meses de adeudos a sus agremiados a más tardar el 15 de diciembre.
- «Algunas de las empresas afectadas han notificado oficialmente a Pemex el impacto que tienen estos retrasos en su posición financiera», señala el documento y advierte que la falta de pago «incidirá en una afectación severa en la producción de hidrocarburos en el país».
Amexhi, que pidió a ambos funcionarios tomar cartas en el asunto, no respondió a una consulta de Reuters sobre la carta. La Secretaría de Hacienda no hizo comentarios y tampoco la de Energía. Pemex no respondió a solicitudes de comentarios.
La estatal ha recibido el equivalente a más de 70,000 millones de dólares durante el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador en capitalizaciones, amortizaciones de deuda, rebajas y beneficios fiscales.
- Sin embargo, ha podido apenas evitar la declinación de su producción de crudo y condensados -que ronda 1.9 millón de barriles por día-, poniendo en duda la promesa del presidente de lograr la autosuficiencia de México en combustibles hacia el final de su mandato en 2024. En su reporte más reciente sobre pagos y adeudos a proveedores, a octubre, Pemex reconoce facturas por pagar por más de 96,000 millones de pesos (5,566 millones de dólares).
- La estatal tiene entre su extensa lista de acreedores a empresas privadas de hidrocarburos como Hokchi Energy, el segundo mayor productor de crudo en México, que en octubre bombeó más de 23,000 barriles por día de petróleo (bpd), y a Fieldwood Energy, el segundo, asociado en México con Petrobal, que produjo cerca de 12,000 bpd de crudo.
Ambos operadores, que obtuvieron sus contratos petroleros tras una profunda reforma energética en México hace casi una década, venden toda su producción de hidrocarburos a Pemex.
En conjunto, Pemex debe a Fieldwood y Petrobal unos 90 millones de dólares, de acuerdo a sus propios datos, y a Hokchi Energy unos 127 millones de dólares.
«La mayoría de los operadores no tienen ninguna otra opción que no sea Pemex», dijo una fuente de la industria con conocimiento del tema y que habló bajo condición de anonimato, pues solo pocas empresas tienen permisos para exportar su producción. «Si hubiera otras alternativas, sería fácil para los operadores voltearse y poder vender a otros clientes», añadió.
- En septiembre, se dio a conocer que Hokchi había notificado a Pemex sobre el inicio de un procedimiento de solución de controversias debido a la falta de pago de unos 190 millones de dólares por la venta de crudo y gas a la gigante estatal.
- Hokchi respondió que no tenía comentarios a una consulta sobre el estado del adeudo con Pemex. Fieldwood y Petrobal no respondieron a una consulta de Reuters.
- Pemex también tiene cuantiosos adeudos con SLB SLB.N, Halliburton HAL.N y Baker Hughes BKR.O, entre otras grandes empresas de servicios petroleros, según cifras de Pemex revisadas por Reuters.
La estatal adeuda a Halliburton el equivalente a 529 millones de dólares, a SLB 474 millones de dólares y a Baker Hughes 311 millones de dólares, según su último reporte de adeudos.
SLB confirmó que ha estado «experimentando retrasos en los pagos» por parte de su principal cliente en México en relación con deudas que no son objeto de litigio. No reveló el nombre del deudor, pero añadió que está «ajustando los niveles de actividad con el cliente en determinados proyectos» y espera resolver colaborativamente los retrasos.
Ni Halliburton ni Baker Hughes respondieron a una consulta de Reuters sobre el tema.
Los datos oficiales de Pemex sobre su deuda con proveedores no incluyen montos en litigio, impuestos, así como trabajos que están en un proceso conciliatorio con acreedores.
- Una fuente del sector con conocimiento del tema, dijo que los números de Pemex coinciden «parcialmente» con los adeudos totales, pues solo incluyen facturas vencidas con «muchos meses de atraso» y no los trabajos realizados con plazos de pago corriendo.
«Es un reto de urgencia», dijo. «Si no, algunas empresas de servicios pudieran morir en el camino», subrayó acerca de la necesidad de pago.
Pemex buscó a privados para llevar a cabo proyectos de sostenibilidad
La estatal Pemex buscaría la participación de inversión privada para llevar a cabo algunos de los proyectos que ha planteado en su plan de sostenibilidad, según una llamada con analistas de este lunes.
- La compañía ha planteado en el documento que hacia adelante buscará impulsar algunas nuevas líneas de negocio como la producción e importación de hidrógeno, la estaciones de carga de autos eléctricos y el impulso a proyectos de cogeneración en algunas refinerías y complejos procesadores de la estatal. Es en este último punto en donde la administración de la compañía ha dicho que podrían participar terceros a través de contratos de servicio.
La estatal no dio más detalles sobre si prevén inversiones privadas en otros segmentos de la operación, solo dijo que buscarán «financiamiento vía contratos de servicio». En su plan, publicado hace unos días, dice que este proyecto «asume que la inversión se hace por medio de contratos de servicio donde CFE o un socio privado realiza la inversión necesaria para proveer el servicio de cogeneración a Pemex».
- La compañía prevé echar a andar estos proyectos de cogeneración en sus complejos procesadores de gas de Cactus, Cangrejera y Morelos; y en las refinerías de Salina Cruz, Cadereyta, Madero, Tula y Minatitlán. Pemex todavía no ha finalizado los estudios técnicos y de mercado, como se indica en el plan publicado.
- Sin embargo, ha propuesto la optimización del portafolio de cogeneración en los proyectos a corto plazo, los cuales podrían ser lanzados hasta el año 2030, así como la expansión de este mismo portafolio en el mediano plazo, abarcando el periodo comprendido entre 2030 y 2035.
- La compañía aún no tiene un capital definido para la puesta en marcha de su plan, que se ha lanzado en vísperas de dar tranquilidad al mercado y los analistas sobre las preocupaciones de la estatal por incursionar en líneas de negocio acordes con la transición energética.
Los analistas han criticado el plan de la compañía por no dar más detalles sobre cómo obtendrá el financiamiento. La puesta en marcha del plan dependerá en gran parte de quien gane las elecciones de junio próximo, aunque los proyectos de las dos candidatas que están al frente en las encuestas incluyen que la petrolera entre a los negocios renovables./Agencias-PUNTOporPUNTO