La boleta para elegir presidente el próximo 2 de junio no tendrá candidatos independientes.
- De las nueve personas que cumplieron los requisitos para ser aspirantes sin partido, ayer que venció el plazo ninguno logró reunir 961 mil 405 apoyos ciudadanos, equivalentes a 1% de la lista nominal del país, en al menos 17 entidades federativas.
El último reporte del INE, del 1 de enero, registraba que los más avanzados fueron Eduardo Verástegui, con 14.47% de las firmas necesarias. Le sigue Ulises Ruiz, exgobernador de Oaxaca, quien sólo alcanzó 6.22% de los apoyos para registrarse como candidato. Los otros siete aspirantes reunieron menos de 500 firmas.
- Detrás del fracaso de los independientes a nivel presidencial están los requisitos que la ley les pide, considerados excesivos por algunos especialistas, lo que ha favorecido que, lejos de que ciudadanos alcancen una candidatura, políticos inconformes con los partidos se aprovechen para buscar cargos. “Creo que estas figuras de las candidaturas independientes sí se tienen que repensar y en el próximo proceso de reforma tenemos que poner énfasis en cómo se dan los procesos para definirlas, tanto en los partidos como para los independientes, porque no nos están funcionando”, señaló a Excélsior Roger Arias García, exdiputado local de Tabasco.
En la elección presidencial del próximo 2 de junio no habrá candidatos independientes. Aunque 32 personas alzaron la mano para buscar una candidatura a la Presidencia por esta vía y nueve cumplieron los requisitos para convertirse en aspirantes, al vencimiento del plazo, ninguna de ellas logró reunir las firmas necesarias para estar en la boleta junto con las candidatas partidistas.
Esto contrasta con su avance a nivel diputaciones, ya que 15 ciudadanos lograron obtener las firmas necesarias para contender por una curul federal de forma independiente, de acuerdo con el último informe del Instituto Nacional Electoral (INE).
- Aunque fueron concebidas como una forma de que los ciudadanos presentaran perfiles más cercanos a la gente en la renovación de cargos de elección popular, el uso de las candidaturas independientes ha sido limitado, junto con otros mecanismos de participación de la ciudadanía, como la iniciativa ciudadana y la consulta popular.
Detrás del fracaso de la figura a nivel presidencial están los requisitos que la ley determina para ésta, considerados excesivos por algunos especialistas, lo que ha favorecido que, lejos de que ciudadanos de a pie alcancen una candidatura, políticos inconformes con los partidos busquen aprovecharla para intentar concretar sus aspiraciones a un cargo./CONGRESO-PUNTOporPUNTO