Enviado Especial: Jorge Martínez
Culiacán, Sin.- julio 8/23. La marcha ciudadana de ayer en Culiacán, que congregó a más de 20 mil sinaloenses que exigen la paz en la entidad, no solo fue un duro reclamo al gobernador Rubén Rocha Moya frente a la inseguridad desbordada sino mostró un peligroso ingrediente: se estaría gestado allí un movimiento estudiantil de gran calado.
El ingrediente estuvo a la vista de todos, pero pocos pusieron atención: prevaleció en la marcha silenciosa una gran presencia de jóvenes.
Y muchos de ellos son estudiantes de la Universidad Autónoma de Sinaloa UAS), institución golpeada en todos sus frentes por el actual gobierno estatal, pero la misma estaría preparando una fuerte respuesta, aliada con otras instituciones estudiantiles del país.
Así, nada extraño sería que en Sinaloa se estuviera incubando un movimiento estudiantil de gran alcance a consecuencia de la confrontación de Rocha Moya contra la UAS, quien, con el apoyo de Morena, ha llegado al extremo de obligar a renunciar a legisladores y presidentes municipales al Partido Sinaloense, cuya alma mater en la UAS.
Por supuesto, esa crisis se inscribe en la confrontación del gobernador contra todo lo que huela a su ex aliado Héctor Melesio Cuén Ojeda, sin importar al parecer las consecuencias.
Así, sin miramientos, el gobierno estatal asfixia presupuestalmente a la institución educativa, pero olvida, o no le importa que la UAS tiene detrás de sí una gran tradición de lucha.
Con esa falta de tacto político del gobernador, en Sinaloa se estaría incubando un gran problema al presidente López Obrador y a la debutante secretaria de Gobernación quien tendría que lidiar con las consecuencias de la falta de sensibilidad política de Rocha. Las condiciones están dadas.
En la marcha del viernes hubo un claro aviso. Si el gobierno federal no pone orden, a México le caería la noche más negra como si no fuera suficiente con la inseguridad pública que se padece y cuyos reclamos ya están en la calle.
En casi todas las notas de prensa de la marcha y en las entrevistas con los marchantes, se puso de manifiesto, se subrayó, que fue muy destacado que fueran tantos jóvenes a la misma.
No fue casualidad. Ellos ya empezaron a tomar las calles. ¿Se habrán dado cuenta las autoridades? Ojalá no sea demasiado tarde./PUNTOporPUNTO