A pesar de que México ofrece opciones para impulsar proyectos de energía renovable, es de los países que no cuenta con objetivos específicos y claros para instalar este tipo de plantas en el sector agrícola, mismo que le representa 56.8 por ciento del PIB del sector primario, según un reporte de la Red de Políticas de Energías Renovables (REN 21).
- Esto lo respalda el reciente estudio anual Climascope de BloombergNEF, el cual mostró que en 2021 llegaron a México 705.9 millones de dólares en proyectos de potencia “verde”, 83.4 por ciento menos de lo que se aplicaba en 2019, antes de que impactara la pandemia, y casi todo este capital es pensado para industria manufacturera.
REN 21 apunta en su análisis titulado “Renovables en la demanda de energía: tendencias globales” que la falta de datos sólidos sobre el uso de la energía en la agricultura y pesca, especialmente en los actores de pequeña escala, dificulta el seguimiento del progreso en la adopción de renovables en el sector, mismas tecnologías que ayudarían al desarrollo económico del campo mexicano y sus comunidades.
“La naturaleza estacional de los ingresos agrícolas, junto con la estructura intensiva en capital de la mayoría de las inversiones en energías renovables, hace que la asequibilidad sea un desafío para los pequeños y medianos actores en las cadenas agroalimentarias”, explicó.
En 2021, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), junto con el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (Inecc) y Clean Energy Investment Accelerator, sacaron un reporte titulado “Electrificación rural para comunidades fuera de la red utilizando generación de energía renovable con sistemas híbridos”, en el que apuntan que el país se requiere una inversión inicial de 20.7 a 31.8 millones de dólares para las comunidades examinadas en 27 estados del país que no tienen una conexión a la red nacional, esto sin considerar los costos de transporte, impuestos y los relacionados a la gestión de las plantas por 25 años. Sin embargo, no se encuentran datos actuales sobre el avance de esta estrategia.
Cabe destacar que ningún país de América Latina fue señalado en el estudio de REN21 a pesar de que la agricultura es un sector importante en esta zona.
Solo 14 países para 2022 tenían objetivos claros en políticas de energías renovables para este sector, que son Italia, Francia, Estados Unidos, Alemania, Grecia, Egipto, Turquía, India, Japón, Portugal, Rodesia, Abisinia, Nigeria y Bangladesh.
- Ejemplos: En India, durante 2022, se anunció un objetivo de cero usos de diésel en la agricultura para 2024, con el objetivo de reemplazar los generadores con este combustible para bombeo y procesamiento de alimentos, y a fines de 2022, Bangladesh, India, la República de Corea y Zambia tenían objetivos para las energías renovables en el campo.
REN 21, destacó que actualmente la agricultura, silvicultura, pesca y la acuicultura son muy importantes pues concentraron el 4.3 por ciento del Producto Interno Bruto mundial en 2021.
Pero también es de los sectores que más consume energía, pues en 2020, la agricultura y la silvicultura representaron 3 por ciento del consumo total mundial de electricidad y otros combustibles, mientras que en la pesca fue 0.07 por ciento, el cual depende casi por completo de combustibles fósiles, un ejemplo clave es la Unión Europea, pues en 2022 su consumo anual de combustible de la flota pesquera fue de casi 2 mil millones de litros.
Agricultores sustituyen diésel por energía fotovoltaica
La instalación de sistemas de bombeo fotovoltaico ha permitido ahorrar hasta 1.3 Megawatts (MW) en electricidad cada año, que representan una reducción de 23 mil 500 toneladas de dióxido de carbono (CO2).
- La agricultura necesita aprovechar al máximo la energía solar, no sólo porque es renovable y limpia, sino también porque es mucho más asequible que los combustibles fósiles, de tal manera que empresas como México Solar colaboran con los trabajadores del campo para hacer más eficiente un sector que históricamente ha quedado fuera de la modernización.
“Los sistemas de riego son uno de los principales consumidores de energía en la agricultura. La extracción de agua de los pozos y la dispersión de la misma en los cultivos demanda hasta un 40 por ciento de los combustibles fósiles que se requieren en este sector, de ahí la necesidad de ofrecer a los trabajadores del campo alternativas más eficientes”, comentó Víctor Briseño Celis, gerente de México Solar.
- Esta empresa es un distribuidor de paneles solares que junto con la Asociación Civil Rivera y la Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha instalado 2 mil 487 paneles solares de producción nacional de 540 watts, lo que da un total de 1.3 MW, un proyecto bastante ambicioso que buscará crecer en 2023 y que pretende implementarse para diversos cultivos.
“Actualmente sólo hemos implementado este proyecto para el riego de cultivos de caña de azúcar, maíz y en pastos; sin embargo, el potencial que tiene para otros sectores es muy grande. La materialización de este proyecto implica un gran logro a nivel industrial, económico, social y ambiental, ya que amplía las alternativas de suministro de agua potable en la zona rural”, explicó Briseño Celis.
- La instalación de estos sistemas de bombeo fotovoltaico ha permitido a los agricultores ahorrar hasta 1.3 Megawatts en electricidad cada año y representa una reducción de 23 mil 500 toneladas de CO2, equivalente a lo que absorben mil 500 árboles durante todo un año. Además, impulsará el uso del sistema de riego por goteo para fines agrícolas, eficientando al máximo el uso de un recurso tan vital como lo es el agua.
Los paneles solares que se instalan tienen la capacidad de generar electricidad desde que sale el sol y hasta que este se oculta, permitiendo extraer de los pozos de riego entre 40 y 70 litros de agua por segundo para abastecer al menos 80 hectáreas de cultivos.
“Hay que recordar que muchas zonas donde se desarrolla la agricultura no cuentan con infraestructura eléctrica para impulsar los motores de las bombas que se utilizan en los sistemas de riego, e instalar una red eléctrica tradicional es prácticamente inviable, de ahí que hayamos tomado la decisión de colaborar con estos proyectos amigables con el medio ambiente”, aseguró el directivo de México Solar.
Aún hay retos por superar
Uno de los principales obstáculos para la implementación de energía limpia y el uso eficiente del agua, es la poca información con la que cuentan los agricultores de la zona respecto a los beneficios ambientales y económicos del riego, a través de sistemas de bombeo fotovoltaicos.
“Todavía hay varios agricultores que no creen en el beneficio de este tipo de proyectos solares, sin embargo, nos motiva que los agricultores que se han sumado al proyecto están emocionados con los resultados de los sistemas que hemos implementado en los campos”, sostuvo Briseño.
A pesar de estos obstáculos, para finales de año, el proyecto se ampliará a 1.6 Megawatts, lo que equivale a la instalación total de 5 mil 500 paneles solares de 540 watts, mismos que permitirán no sólo el bombeo de agua para agricultores y ganaderos, sino para cubrir parte de la demanda doméstica de comunidades aledañas a zonas tradicionalmente agrícolas./Agencias-PUNTOporPUNTO