A cuatro meses de la entrada en vigor de la Ley General para el Control de Tabaco (LGCT), los fumadores en la Ciudad de México parecen inmunes a las restricciones por fumar o vapear en espacios públicos.
- Especialistas señalan que la falta de capacidad de las autoridades para vigilar y sancionar estos actos; así como la poca participación ciudadana son los grandes retos en la capital, donde se estima hay más de 1.9 millones de fumadores.
- Según el Reglamento de la LGCT, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) es la instancia a cargo de la vigilancia y las posibles sanciones a establecimientos y ciudadanos.
No obstante, desde la entrada en vigor del Reglamento (el pasado 15 de enero) organizaciones como Salud Justa MX, Códice y Los rescatadores enfatizaron que el órgano desconcentrado de la Secretaría de Salud federal no cuenta con los verificadores para garantizar su aplicación, dejando en manos de la ciudadanía la responsabilidad de presentar las denuncias.
“Falta que se empiecen a tomar acciones en contra de los establecimientos que no cumplen con la ley. Este déficit que tenemos en su aplicación es algo que sí necesitamos que, tanto la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios –como las comisiones estatales–, hagan esta función de vigilancia para el cumplimiento de la ley”. — Erick Antonio Ochoa, Director de Salud Justa Mx.
En enero entraron en vigor las nuevas disposiciones que se publicaron en el Diario Oficial de la Federación (DOF) en de diciembre de 2022, mismas que estipulan el retiro de la promoción, la publicidad (directa e indirecta) y de los productos en exhibición elaborados con tabaco en todos los centros de venta del territorio mexicano.
- Además, se incorporaron modificaciones para que todos los espacios públicos cerrados, áreas interiores de trabajo, sitios de concurrencia colectiva, centros educativos, parques, restaurantes, playas y otros espacios se declararon espacios 100% libres de humo de tabaco o vapeador.
- Sin embargo, pese a las restricciones en la publicidad y exhibición (no de venta), la industria del tabaco, restaurantes, bares, tiendas de conveniencia y autoservicio respondieron a la regulación con alrededor de 2 mil 500 amparos a nivel nacional.
La CDMX es una de las nueve entidades (junto con Nuevo León, Coahuila, Querétaro, Quintana Roo, Morelos, Guanajuato, Puebla y Estado de México) en las que se concentraron el 80% amparos contra el Reglamento y la LGCT, los cuales argumentan daño económico a los establecimientos y afectación a la libertad de comercio.
Cabe señalar, que es la Ciudad de México la entidad que mayor resistencia presentó a la medida, con más de 800 amparos (32%), según el recuento de la organización civil, Salud Justa MX.
Por su parte, los fumadores capitalinos siguen esparciendo el humo en espacios públicos, parques, a las afueras de centros de trabajo y oficinas. Si bien, en los establecimientos los exhibidores de cajetillas se cubrieron, e incluso, algunos vendedores ambulantes cumplen al no publicitar la venta de tabaco, es también en la informalidad dónde las cosas no han cambiado del todo.
- Pese a la resistencia del sector empresarial y los fumadores capitalinos, la CDMX ha sido pionera en la lucha por los espacios libre de humo. En el marco de la conmemoración del Día Mundial Sin Tabaco de este 31 de mayo, se cumplen 15 años de la entrada en vigor de de la reforma la Ley de Protección a la Salud de los No Fumadores en el entonces Distrito Federal, (en febrero de 2008), los que posibilitó que la capital fuera la primera ciudad 100% libre de humo en el país.
Aunque el cumplimiento cabal de la ley sigue lejos de la realidad, el director de Salud Justa Mx, Erick Antonio Ochoa, considera a la LGCT y su Reglamento como el mayor avance en la lucha contra el humo de tabaco y vapeadores. Sin embargo, recalcó que hace falta una campaña de difusión, y que la ciudadanía juega un rol crucial en el cumplimiento de la ley.
“Nuestra invitación también es que la propia ciudadanía exija el cumplimiento de estos ordenamientos. Este es el principal cambio que nos puede ayudar a que a que esta ley se cumpla”.— Erick Antonio Ochoa/CONGRESO-PUNTOporPUNTO