A tres años del primer caso de covid-19 en México, se ha logrado un estado de “inmunidad general” contra infección grave del virus Sars-CoV-2, ya que más de 80% de la población ya se contagió, reveló a Excélsior, Samuel Ponce de León Rosales, coordinador de la Comisión Universitaria para la Atención de la Emergencia de Coronavirus de la UNAM.
Aclaró que no se puede hablar de una “inmunidad de rebaño” porque la transmisión de la enfermedad continúa —aunque con menos agresividad— debido al avance de la vacunación.
“Tenemos un escenario completamente diferente. No estrictamente como inmunidad de rebaño, pero si de una inmunidad general, que nos permite contender en esta interacción hombre- virus de una mejor manera.
“Yo creo que en nuestro país más de 80% de la población seguramente tuvo la infección y un porcentaje muy alto también ya están vacunados. Y considero que hay un sector indudablemente que no se ha infectado, pero yo diría que actualmente es menor a 20%”, explicó.
No obstante, Samuel Ponce de León, señaló que todavía no se puede predecir una época del año en la cual, la pandemia de coronavirus, podría convertirse en una endemia, como sucedió, por ejemplo, con la influenza estacional.
Lo que sí se puede esperar, dijo, es que, si no surge una nueva variante o subvariante, a mitad de este año, el país podría experimentar una estabilización en la transmisión del coronavirus.
¿Cuándo vamos a decir hasta aquí terminó la pandemia, y a partir de aquí, empezó la endemia?
Lo tendremos que decir, posiblemente, dentro de nueve meses y considerando, que hay la posibilidad de que, en el primer semestre de 2023, esto se estabilice a partir de mayo o junio.
“Hemos tenido la misma cifra muy baja de contagios y muertes, pero necesariamente se tendrá un diagnóstico sólo con un análisis retrospectivo y no anticipándonos a los hechos”, indicó.
- Cubreboca, de uso permanente: El también coordinador del Programa Universitario de Investigación en Salud (PUIS), señaló que, sin ser obligatorio, se deben impulsar campañas educativas para el uso permanente de cubrebocas en distintas situaciones de riesgo de contagio, no sólo ante covid-19, sino para enfrentar otros virus y diversos patógenos que circulan en el ambiente.
Añadió que las medidas de higiene como el uso de gel sanitizante fuera de casa o el lavado constante de manos, también debe mantenerse, ya que reduce considerablemente las posibilidades de contagio de otro tipo de infecciones.
“El cubrebocas es muy útil para limitar riesgos cuando usamos el transporte público, en auditorios o sitios de aglomeración de personas.
“Pero en lugar de transformarlo en una medida de obligación, sería ideal que se integre a un proceso de educación que empiece desde la niñez y dentro de las familias.
“Para mí es muy claro, que el cubrebocas tendría que convertirse en una prenda más de nuestra vestimenta para fines prácticos, y es desde luego, mucho más útil un cubrebocas que ponernos una corbata”, expuso el investigador de la UNAM.
- Más de siete millones han enfermado: La noche del jueves 27 de febrero de 2020, a través de redes sociales, se dio a conocer que el virus SARS-CoV-2 había llegado a México.
Pero fue hasta la mañana del viernes 28, cuando en la conferencia presidencial matutina, Hugo López-Gatell Ramírez, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, confirmó que se había detectado un primer contagio en un hombre de 35 años, que se encontraba internado en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER), luego de haber llegado de Italia con síntomas.
A tres años, oficialmente, los casos de coronavirus, ascienden a 7 millones 430 mil 816.
De acuerdo con el último informe técnico semanal de covid-19, publicado por la Secretaría de Salud, el pasado martes 21 de febrero, las defunciones aumentaron a 332 mil 850, desde el 18 de marzo de 2020, cuando se registró el primer deceso.
Se trató de un hombre de 41 años que padecía diabetes y que estuvo internado por más de una semana en el INER en la Ciudad de México, publicó ese día la Secretaría de Salud a través de su cuenta de Twitter.
“Hoy en México falleció la primera persona con covid-19. Inició sus síntomas el 9 de marzo y padecía diabetes. El secretario de Salud expresa sus condolencias a sus familiares. Descanse en Paz”.
Este caso ocurrió sólo 12 días después del primer deceso.
- El 30 de marzo de 2020 se decretó la emergencia sanitaria en México, la cual, ordenó la suspensión inmediata de actividades no esenciales en los sectores público, privado y social.
- Nueve meses después, de la declaratoria, se abrió una luz de esperanza con la puesta en marcha del Plan Nacional de Vacunación contra el virus SARS-CoV-2 que inició el 24 de diciembre de 2020.
Desde esa fecha, se ha vacunado, con al menos una dosis a 84% de la población —con cinco años o más— que radica en México, lo cual, significa que 99 millones 261 mil 253 han sido inmunizados, de un total de 118 millones 240 mil 242 de personas dentro de este rango de edad. Patricia Rodríguez Calva
Pandemia dejó más de 240,000 niños en orfandad
Doce días padeció los síntomas de la covid-19 en su casa. Era mayo de 2020. Hacía tres meses del inicio de la pandemia en México y el confinamiento social se había impuesto en todo el país. Los hospitales atendían principalmente a las personas contagiadas y graves. Las pruebas diagnósticas escaseaban y las dudas sobre la enfermedad aumentaban.
- En ese contexto se contagió Ariel, un auxiliar de limpieza del Centro Médico Nacional Siglo XXI. Tenía 43 años. Buscó atención médica en hospitales públicos desde el 16 de mayo de 2020, cuando la fiebre, el dolor muscular y la alta presión arterial se manifestaron. Pero no lo recibieron en ninguno. Lo regresaron a su casa porque “los síntomas no eran graves”. Ahí murió el 28 de mayo de 2020.
“Me decía: ‘¿sabes qué? Yo sé que de ésta ya no salgo. Cuida a los niños, cuídate tú’”, recuerda su esposa Cynthia Vázquez, quien quedó sola a cargo de sus hijos de 8, 6 y 2 años de edad….Pero esto fue lo que le tocó, dejar a sus hijos sin padre.
“Si se hubiera contagiado un año después, a lo mejor…”, agrega. Su comentario ilustra lo que pasó en México al inicio de la pandemia, cando las autoridades minimizaron el riesgo de la enfermedad y muchas personas no buscaron atención médica a tiempo, por lo que las muertes en el país se elevaron, una cifra que se redujo con la llegada de las vacunas a finales de 2021.
- A tres años de que en México se confirmara oficialmente el primer contagio de covid-19, algunas familias recuerdan el dolor de perder a sus seres queridos, de ser víctimas de un sistema sanitario que no estaba preparado para una pandemia de tal magnitud y de ver a niños, niñas y adolescentes en orfandad.
De las infancias se dijo, incontables veces, que eran las menos afectadas por la pandemia. Pero la realidad ha mostrado que las afectaciones son diversas y no se reducen al contagio.
“No es una pandemia, son tres”, subraya el doctor Gustavo Olaiz, coordinador general del Centro de Investigaciones en Políticas, Poblaciones y Salud de la Facultad de Medicina de la UNAM. Se refiere a los contagios y muertes directos por covid-19, y a sus otros efectos: los problemas de salud mental en aumento, las secuelas físicas que ha dejado la enfermedad en miles de personas.
- Como los hijos de Cynthia y Ariel, entre marzo de 2020 y agosto de 2021, 157,700 niños y niñas de México habían perdido a su padre, madre o ambos a causa de la enfermedad covid-19. Además, 169,500 perdieron a su cuidador principal o secundario por el mismo motivo. Estas cifras fueron estimadas en el estudio “La orfandad ocasionada por la pandemia”, publicado por el Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República.
En total, durante ese periodo, 244,500 menores de edad perdieron a sus cuidadores, incluyendo padres, madres o abuelos con custodia o que vivían con ellos. Esto coloca al país en el tercer lugar con más menores en orfandad de entre las 10 naciones con más muertes por covid.
- La estimación de 244,500 menores huérfanos de algún cuidador ya considera el exceso de mortalidad registrado en México por la pandemia. Sin tomar en cuenta ese dato, se reportarían 141,132 niños y niñas en orfandad. Pero, incluso así, México se ubicaría en el primer puesto de seis países de América (Estados Unidos, Argentina, Brasil, Colombia y Perú) con más menores en esta situación.
“Lo anterior refleja que, dentro de los 10 países con más fallecimientos a causa de la covid-19 en el mundo, las niñas y los niños de México han sido los más afectados en cuanto a la pérdida de cuidadores primarios y secundarios”, explica la autora Carla Angélica Gómez.
Desde el gobierno federal, la iniciativa que surgió para atender a los menores con algún grado de orfandad por la pandemia fue un convenio entre la Coordinación Nacional de Becas Benito Juárez y el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (SNDIF) para otorgarles becas de 800 pesos mensuales.
Sin embargo, no basta con un apoyo económico, explica la psicóloga particular Pilar Martínez. La pérdida de los cuidadores principales, el impacto a la salud mental, el cierre de escuelas, entre otros aspectos, han marcado al mundo y, en particular, a las niñas, niños y adolescentes. Estas infancias vivieron a muy temprana edad un duelo importante y deben enfrentar el reto de encontrar resiliencia para seguir. Para ello requieren apoyo socioemocional y, por ahora, en las escuelas y servicios de salud públicos es una tarea pendiente.
“Aunque digan lo contrario, los más jóvenes y pequeños quedarán marcados por la pandemia y nuestro deber es acompañarles”, subraya./Agencias-PUNTOporPUNTO