El agua es uno de los elementos más importantes para los seres vivos. Una persona sólo sobreviviría una semana sin tomar agua. Además, es necesaria para bañarse, cocinar, lavar ropa, así como en la industria, minería, campo, entre otros.
Pero este importante recurso es cada vez más escaso, pues a pesar de que tres cuartas partes del planeta es agua, solo el 3 por ciento es potable.
- Pero con el crecimiento acelerado de la población, la disponibilidad de agua ha disminuido considerablemente, mientras que en 1910 era de 31 mil m³ por habitante al año, en 2019 disminuyó a 3 mil 586 m³ anuales por cada mexicano, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Los estados de México con más agua
- En México hay diferencias muy grandes en cuanto a la disponibilidad de agua, de acuerdo con información del Inegi.
- El organismo indica que las zonas centro y norte son, en su mayor parte, áridas o semiáridas.
“Los estados norteños, (Baja California, Baja California Sur, Coahuila, Chihuahua, Nuevo León, Sonora y Tamaulipas) reciben apenas el 9 por ciento del agua renovable al año”, señala el Instituto con datos de 2019.
En las entidades del sur-sureste: Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Campeche, Quintana Roo, Yucatán, Veracruz y Tabasco, es lo contrario, pues reciben más de la mitad del agua al año con 67.2 por ciento.
Sin embargo, los habitantes tienen menor acceso, pues no cuentan con los servicios básicos, como es agua entubada dentro de la vivienda.
En tanto, en el Valle de México se encuentra la disponibilidad más baja, con solo 144 m³/hab).
Entidad – Agua renovable per cápita al 2019 (m³/hab/año)
- Chiapas – 20,619
- Oaxaca – 13,612
- Tabasco – 12,897
- Yucatán – 9,799
- Durango – 6,874
- Veracruz – 6,240
- Campeche – 6,046
- Guerrero – 5,759
- Nayarit – 5,075
- San Luis Potosí – 3,815
- Sinaloa – 3,212
- Chihuahua – 3,054
- Colima – 2,799
- Michoacán de Ocampo – 2,679
- Hidalgo – 2,481
- Zacatecas – 2,474
- Tamaulipas – 2,423
- Sonora – 2,316
- Jalisco – 1,926
- Puebla – 1,771
- Baja California Sur1,443
- Coahuila de Zaragoza – 1,116
- Quintana Roo – 993
- Morelos – 920
- Querétaro – 915
- Nuevo León – 828
- Baja California – 827
- Guanajuato – 648
- Tlaxcala – 644
- Aguascalientes – 396
- Estado de México – 268
- Ciudad de México – 73
TOTAL NACIONAL – 3,586
47% no tienen acceso al agua, alertan
En México, el 47 por ciento de la población no tiene acceso a agua potable, y la infraestructura para abastecimiento y saneamiento de agua, presenta un deterioro acumulado a lo largo de las últimas décadas, alertó el presidente de la Comisión de Infraestructura de la Cámara de Diputados, Reginaldo Sandoval.
- Al dar continuidad a los trabajos de la Semana Nacional de Infraestructura Transformadora, el congresista del Partido del Trabajo (PT) añadió que en materia de “estrés hídrico”, el país sufre una situación grave.
Recalcó que las deficiencias en la infraestructura hídrica a nivel nacional, agravan la situación.
“En última actualización del Atlas de Estrés Hídrico, 2019, elaborado por el Instituto de Recursos Mundiales, México se ubica en el lugar 24 de 164 a nivel internacional de los países que enfrentan un estrés hídrico extremadamente alto, porque gastamos el 80 por ciento o más de nuestras reservas de agua”, apuntó.
A nivel latinoamericano, abundó, después de Chile, México es el país que más problemas en el rubro hídrico presenta, remarcó.
Sandoval Flores añadió que para ser sustentables en materia hídrica, el país requeriría una inversión anual de 49 mil millones de pesos, en un periodo de al menos 21 años.
“La infraestructura en el sector del agua y en especial las de abastecimiento y saneamiento sufren un deterioro evidente porque acumulan décadas sin atención y cuidados”, manifestó.
“Para alcanzar la sustentabilidad hídrica a nivel nacional, se necesitan al menos 21 años, con un ritmo de inversión anual por el orden de los 49 mil millones de pesos, de acuerdo con cifras del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua”, advirtió.
- El congresista del PT señaló que la problemática podrá solucionarse, solo si las políticas de gestión del agua se llevan a cabo de manera transversal, donde las autoridades federales, municipales y estatales, así como las empresas e integrantes de sectores productivos y ciudadanía, contribuyen a ello.
Es tiempo de invertir los recursos necesarios en el tema hídrico, enfatizó el legislador del bloque mayoritario en San Lázaro.
A tiempo para reducir el impacto del estrés hídrico en México
Uno de los dilemas más urgentes que se tienen por resolver en el mundo, es el suministro de agua. De acuerdo a las previsiones de los gobiernos, el incremento de la población global aumentará la demanda de agua hasta en un 55% para el 2050. Una de las causas por las que el estrés hídrico debe empezar a resolverse desde hoy.
- En México, según datos de Conagua, el problema ya es preocupante, pues el 42.11% de los acuíferos están sobreexplotados, ya que la extracción excede en 10% a la recarga, lo que ocasiona un problema de suministro inmediato.
Manuel Pérez Sarmentero, Director de Desarrollo de Negocios Sector Público en Veolia, grupo líder mundial en gestión del agua, residuos y servicios energéticos, explica que una mayor extracción de agua de la que se introduce en los mantos acuíferos, implica un costo ambiental, social y empresarial extremadamente alto, el cual requiere un gran esfuerzo de distintos actores, tanto de la sociedad civil, como de los sectores públicos y privados.
“El esfuerzo por revertir el estrés hídrico de manera acelerada como lo necesitamos ahora, no lo puede hacer un único actor, necesitamos la participación de la sociedad y una asociación público-privada que brinde inversión oportuna en tecnología y una correcta gobernanza de los sistemas de agua por medio de la experiencia y conocimiento de expertos”, comentó.
- Las áreas por cubrir son amplias y diversas, pues van desde una insuficiente recolección y captación, un bajo porcentaje de tratamiento y reutilización del recurso hídrico y una constante inversión en mantenimiento y solución de problemas con la red de agua potable, en la cuál México tiene un proceso tan lento de renovación, que podría llevar hasta cien años en realizarse por completo.
Esta situación tan crítica obliga a tener una reacción inmediata para evitar el desabasto de agua desde hoy y evitar una crisis insostenible a futuro, pues son cada vez más los casos de desabasto en México y el mundo.
“Ya vamos tarde en el proceso para revertir el problema. Lo que se necesita es una planeación adecuada de acción en cada región con soluciones tecnológicas, estudios geológicos adecuados para observar el acuífero y tener los datos certeros tanto de entrada y extracción. Evidentemente esto requiere inversión, pero es una acción completamente necesaria para evitar casos como lo ocurrido recientemente en Monterrey“, explicó el experto.
Propone UAM modelos para enfrentar crísis hídrica del Valle de México
El rescate y rehabilitación del Lago Tláhuac-Xico es una propuesta atrevida y remarcablemente rentable sobre cómo se podría abordar la crisis hídrica que enfrenta el Valle de México y mejorar la vida de miles de personas, aseguró David Barkin Rappaport, Profesor Distinguido de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
El experto calificó de extraordinario el proyecto de los investigadores de la Unidad Iztapalapa, porque implica trabajos de limpieza que mejorarían la vida de centenares de miles de ciudadanos que en este momento sufren inundaciones por el encauzamiento de aguas negras.
- La habilitación del Lago Tláhuac-Xico, ubicado en tierras ejidales, permitirá proteger a las poblaciones del riesgo de inundación y proveerá aguas pluviales potabilizadas en sustitución de la sobreexplotación de los acuíferos”.
- De igual forma, agregó, el proyecto para construir un humedal en el Bosque de Chapultepec a cargo del doctor Alejandro Alva Martínez, investigador del Departamento de Hidrobiología de la misma sede, es “un ejemplo perfecto de cómo transformar una región que tenía mucho cemento para crear otra vez humedales que contribuirían a dar tratamiento a aguas negras y producir flora para enriquecer otras partes de la zona”.
En el Ciclo de conferencias magistrales organizado por la Red de investigación en Agua, David Barkin manifestó que otro proyecto, “en el que las unidades Iztapalapa, Lerma y Xochimilco estamos colaborando con los moradores de Texcoco y la Universidad de Chapingo, es muy importante para entender que el Parque Ecológico Texcoco.
“No sólo debe ser concebido como un lugar de recreación para estancias cortas o como un jardín de diversión, sino como un área natural protegida o mecanismo de equilibrio.
En este contexto, añadió, “recordar y celebrar los trabajos de los ingenieros de 1960 cuando propusieron que esa zona lacustre fuera de riqueza social, ambiental, con capacidad de equilibrar los flujos y ciclos hídricos en todo el país”, en tierras destinadas –hasta el sexenio pasado– para el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México.
- En su ponencia “Una mirada crítica de la sequía contemporánea, el académico del Departamento de Producción Económica de la Unidad Xochimilco sostuvo que el trabajo que se realiza en las cinco unidades de la UAM representa un tributo a la capacidad, creatividad y aportaciones de la ciencia para enfrentar la sequía, el cambio climático y reducir la crisis ambiental en la capital.
La Comisión Nacional del Agua la situación actual en México como una espada de doble filo, porque además del tema natural prevalece también un problema social y políticamente creado, dado que los “millonarios del agua están consumiendo 22% del líquido concesionado”.
Entonces, se observa que las extracciones del recurso no están sólo en las zonas de mayor sequía, sino que los 99 acuíferos del país están mostrando una tremenda dificultad originada por la larga historia de abuso y proceso de las concesiones legales e ilegales, como lo señala un artículo de la revista Argumentos de la Unidad Xochimilco.
“La Ciudad de México ha negado sus ríos en los últimos 70 años, los ha entubado, y a los habitantes se nos ha olvidado que las ciudades necesitan estos afluentes, cuyo recuperación es extraordinariamente fácil y posible para volver a una urbe lacustre”, propuso Legorreta Gutiérrez en su libro El agua de la Ciudad de México, en el que planteó diez elementos fundamentales para su rescate.
- Las autoridades actuales han dado gran impulso a ciertos componentes enunciados por el académico de la Unidad Azcapotzalco, “pero se necesita involucrar a la población para el almacenamiento pluvial, porque las políticas públicas no van a funcionar si no hay conciencia de la organización social, toda vez que este proceso de rehabilitación de los acuíferos del Valle de México también plantea establecer parques en las colonias periféricas para detener un poco el ritmo de la urbanización y hacer más manejable la complicación generada por la necesidad de transporte”.
“El proyecto Sierra Nevada, en el que investigadores de la Unidad Iztapalapa participan de manera activa con una visión a futuro, propone –más allá de identificar que estamos en una cuenca cerrada– aprovechar y gestionar el líquido para fortalecer y enriquecer las subcuencas y microcuencas, y crear posibilidades de vegetación en las partes altas que garantizarían la infiltración para prevenir inundaciones”, puntualizó.
En este sentido, “el saneamiento empezaría de arriba, que es la forma más eficiente de reducir la contaminación en las partes más bajas, por lo que es muy importante corregir el gran error histórico de mezclar agua pluvial y residual, que padecemos en el Valle de México”, subrayó el especialista en economía ecológica y desarrollo regional./Agencias-PUNTOporPUNTO