CRISIS ENERGÉTICA GLOBAL por la Guerra; escasez de HIDROCARBUROS y alza en los precios del PETRÓLEO

AMLO, negó que la situación llegue a afectar en dicha materia a México, pues, aseveró, “el país cuenta con otras formas de generar energía eléctrica” en caso que llegara incrementar los costos del recurso.

Nadie puede predecir con certeza si el conflicto entre Rusia y Ucrania se extenderá. Sin embargo, si la crisis se agrava, tendría consecuencias a escala mundial. La inestabilidad desatada no sólo encerraría a la Unión Europea en un crisis energética, sino que también podría exponer al mundo a un escasez del suministro, además de disparar los precios de forma espectacular por el desequilibrio entre oferta y demanda.

  • El continente europeo no puedo prescindir de los gasoductos rusos de Gazprom a corto y medio plazo, incluso porque la producción de otras regiones del mundo no sería suficiente para compensar las importaciones de Rusia. Los gasoductos que maneja el Kremlin proporcionan hasta el 40% del consumo europeo de gas.
  • Vladimir Putin está mostrando un arma poderosa, capaz de disuadir a los europeos de reaccionar, o al menos de dividirlos, pero atemorizar al mismo tiempo a los países occidentales, que verían un alza inflacionaria aún mayor que la de los últimos meses.
  • Si bien por el momento no hay una razón de pánico, las alarmas comienzan a encenderse: el peregrinaje hacia la primavera europea no provocaría un faltante en el corto plazo. Sin embargo, las instalaciones de almacenamiento de gas están bastante maltratadas. Sólo en Alemania los tanques de reserva están llenos en un 30 por ciento.

“El suministro este invierno no está en riesgo”, dice Janis Kluge, que se ocupa de Rusia y el suministro de energía en Stiftung Wissenschaft und Politik (SWP) en Berlín. “La pregunta es: ¿qué pasará el próximo invierno y el siguiente?”.

Por el momento, el problema no sólo ha podido ser superado por cierta habilidad diplomática estadounidense que está maniobrando para solucionar la dependencia europea.

“Las empresas chinas están comenzando a transportar GNL a Europa”, dice Andreas Goldthau, investigador de seguridad energética en la Universidad de Erfurt a la prensa alemana. “Y simplemente porque vale la pena”.

No obstante, si la crisis escala es de esperar que no pueda haber reposición tan sencilla en primavera y verano, meses que Europa proyecta los reabastecimientos. Si se suman los problemas técnicos en una plataforma de producción de gas frente a las costas de Noruega y una demanda que vuelve a dispararse en Asia, todos los elementos estarán presentes para una tormenta perfecta.

Europa podría llenar parte de vacío con gas licuado, aunque no sabe a qué precio. Actualmente hay una capacidad en el mercado mundial de 500 mil millones de metros cúbicos de GNL, que es aproximadamente tres veces los 170 mil millones de metros cúbicos que suministra Rusia.

Pero Goldthau advierte que “la mayor parte del suministro está vinculada a contratos a largo plazo”, es decir no tan fáciles de desviarlos de compradores hacia nuevos en otros continentes.

  • Para atraer el recurso de Estados Unidos o Qatar a las costas europeas, habrá que pagar un precio tan atractivo como el de los importadores chinos, japoneses y coreanos, que son los mayores consumidores y se benefician de contratos de suministro seguros.
  • Mientras, en el mercado mayorista de los Países Bajos, el precio de la preciada molécula de metano se intercambia cuatro veces más caro de lo habitual en esta época del año. Y las tensiones en el Donbass recién comienzan. La proyección, para los analistas, es que será imposible que los precios vuelvan a bajar en este juego de alta competencia.

Mike Fulwood, investigador del Instituto de Estudios Energéticos de Oxford, por su parte, sostuvo que la crisis del gas durará porque se deberán reinyectar enormes cantidades de gas en el almacenamiento en primavera y verano, en preparación para el invierno 2022-2023.

Esta demanda mucho más alta de lo habitual respaldará los precios, que se mantendrán altos durante todo el año, e incluso irán más allá. Pero, aunque se pague mucho más, no hay suficiente gas noruego o argelino, o GNL, para prescindir del gas de Rusia.

“Simplemente no habría suficiente capacidad de producción en el mundo”, resume Fulwood, A corto plazo, solo se pondrán en marcha un puñado de unidades de producción de GNL adicionales, en Estados Unidos, Mozambique o Australia.

  • El panorama energético ya es complejo como consecuencia de la post pandemia del coronavirus. La economía y los consumidores están sufriendo los altos precios de la energía. El precio del gas en Alemania ya es cinco veces superior al de EEUU. Italia, tambien lo ve en el aprovisionamiento de combustible: se llega a pagar hasta 2 euros un litro de nafta.

Impulsados ya por la recuperación económica mundial los precios marcan las tensiones. El martes, el precio del gas en Europa superó los 75 dólares por megavatio hora (MWh), mientras que el del petróleo trepó muy cerca de los 100 dólares.

En todo el mundo, los consumidores están notando la crisis de precios de la energía, con reposiciones de tanques de combustibles por las nubes y facturas por calefacción en un punto impagables.

  • Clemens Fuest, presidente del Instituto Ifo, teme que la situación pueda empeorar incluso si no se restringe el suministro de gas. “Incluso entonces habría un shock de precios, al menos temporalmente”, lo que afectaría tanto a particulares como a empresas.

“Hasta ahora, esperamos una tasa de inflación del cuatro por ciento para 2022. Si estalla una guerra, podría ser aún mayor”, agregó.

Finalmente el clima puede dar otra sorpresa. En Sudamérica muchos países han sido víctimas de fuertes sequías que han frenado la producción de energía hidroeléctrica. Brasil es un ejemplo real, ya que el sector hidroeléctrico aporta más del 60% de la producción energética.

De esta manera, países latinoamericanos que no lograran cubrir los faltantes con la provisión del gas de Bolivia, deberán también recurrir al gas envasado, en un mercado con demanda creciente y una oferta que no será insuficiente.

Las sanciones se dirigen hacia el gasoducto Nord Stream 2

Un día después de que el canciller alemán, Olaf Scholz, anunciara que detendría el proyecto Nord Stream 2, un conducto para llevar gas natural desde Rusia hacia Alemania, el Gobierno de Estados Unidos anunció sanciones a la empresa e instituciones relacionadas con el proyecto.

«Al actuar junto con los alemanes nos hemos asegurado de que esta sea una inversión de 11.000 millones de dólares que ahora es un trozo de acero en el fondo del mar (…) Este es el comienzo de nuestra respuesta. Si Putin escala aún más, escalaremos aún más utilizando sanciones adicionales y controles de exportación», dijo Ned Price, portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos.

En Alemania, país que recibiría al menos un 70 % de las entregas totales de gas a través de ese gasoducto, se muestran tranquilos pese a la decisión del canciller. De hecho, el ministro de Economía, Robert Habeck, afirmó que el país «puede sobrevivir sin el gas ruso».

  • El Nord Stream 2 se encuentra completamente listo pero no ha recibido la licencia para operar. Por ello, representantes del Gobierno alemán han señalado que la decisión no tendría impacto alguno, puesto que la tubería no estaba en funcionamiento.
  • Sobre la dependencia de algunos Estados europeos al gas ruso, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, indicó que trabajarán para dejarla de lado.

«Rusia ha instrumentalizado la energía durante el último mes, por no decir años, para presionar, no solo a Ucrania sino también a la Unión Europea. Y ahora estamos realmente decididos a salir de la dependencia del gas de Rusia», señaló Von der Leyen.

  • Las palabras de la presidenta se produjeron durante un encuentro con el primer ministro de Noruega, Jonas Gahr Støre, una nación que no forma parte del bloque comunitario, pero que suministra gas a algunos Estados de la Unión.

Con planes de diversificación de sus fuentes de combustibles, la Unión Europea busca contrarrestar posibles efectos negativos contra su economía, sin embargo faltará ver si Rusia es realmente solo «una gasolinera muy grande», o si su aislamiento causará grandes estragos a los socios europeos y a otras economías mundiales.

México quedaría tablas por alza de petroprecios

México podría tener efectos “mixtos por el aumento en los precios de los energéticos, por la crisis ruso-ucraniana, dejará una mayor entrada a las arcas del país, la ganancia quedará ‘tablas’, con las importaciones de gasolinas y otros combustibles”, señaló el especialista en temas del sector energético, Gonzalo Monroy.

“Todo lo que vamos a recibir de ingresos adicionales por la exportación de petróleo”, puesto que en el Paquete Presupuestal 2022 se fijó el precio del crudo mexicano en 55 dólares, y ahorita la mezcla mexicana está prácticamente en 90 dólares; “todos esos son ingresos adicionales que tendría a discrecionalidad el gobierno”.

  • Sin embargo, recalcó en entrevista con Pascal Beltrán del Río, para Imagen Multicast, “es importante la cantidad de gasolina, diesel y turbosina que se está importando, productos mucho más caros, incluso que el petróleo”, por lo que México terminaría perdiendo “un poco de dinero, o quedaría prácticamente neutro”.

Señaló que si el conflicto en la región ucraniana del Donbass escala, México podría resentir una presión inflacionaria al alza, no sólo en los energéticos, sino en una gran variedad de productos, entre ellos el aluminio, el cobre y el cobalto, implementos estos últimos, necesarios para la fabricación de semiconductores, que ya arrastran una situación crítica, por la pandemia.

Rusia es un productor muy importante de gas natural y petróleo”.

AMLO negó que conflicto afecte a México en materia energética

La creciente tensión por el conflicto entre Rusia y Ucrania amenaza al sector energético con una posible alza el precio de los hidrocarburos para los mercados internacionales.

  • A pesar de ello, el presidente, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), negó que la situación llegue a afectar en dicha materia a México, pues, aseveró, “el país cuenta con otras formas de generar energía eléctrica” en caso que llegara incrementar los costos del recurso.

“Tenemos las hidroeléctricas; tenemos el combustolio, en caso extremo, y tenemos el carbón, también en caso extremo. Pero no nos quedaríamos sin energía eléctrica, aún aumentando el precio del gas”, comentó en su conferencia matutina.

“No tenemos problema porque tenemos contratos para recibir gas. En caso que llegara a aumentar el precio, tenemos otras energías. (…) No hay nada que temer en cuanto a que nos falte energía eléctrica en caso de un. agravamiento del conflicto entre Rusia y Estados Unidos, u otros países por la situación en Ucrania”.

Asimismo, aprovechó para refrendar la postura de “no intervención” que México expresó ante el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). En ese tenor, declaró que México “no acepta que un país invada a otro” y exhortó a las naciones potencia a “actuar de manera responsable”.

“No queremos invasiones. No aceptamos que un país invada a otro. No hay ninguna razón, es contrario al derecho internacional de las naciones (…)

  • Lo que no queremos es que hayan conflictos. Nosotros somos partidarios de la paz y del diálogo de los acuerdos. Sobretodo, que actúen de manera responsables las potencias. Y que se abandone para siempre la costumbre del intervencionismo y las invasiones”, sentenció.

Esto, en seguimiento al pronunciamiento del canciller mexicano, Marcelo Ebrard, del 21 de febrero, en el cual llamó a la solución pacífica del conflicto, así como a la integridad de Ucrania y de las resoluciones de la ONU.

Precio del barril de petróleo supera los 100 dólares

El ataque de Rusia a Ucrania trajo consecuencias económicas inmediatas. Los precios del petróleo se dispararon por encima de los 100 dólares por primera vez en más de siete años.

  • La subida se produjo luego de que el presidente ruso, Vladimir Putin, anunciara una “operación militar” en Ucrania en un inesperado mensaje por televisión poco antes de las 6:00 de la mañana de Moscú.

Ante la amenaza que significó el mensaje de Putin, el Brent (de referencia en Europa) subió a 100.04 dólares el barril. Es la primera vez que los precios del petróleo superan la barrera de los 100 dólares en más de siete años.

El petróleo podría subir aún más tras las sanciones aprobadas por EU contra el consorcio encargado de operar el gasoducto Nord Stream 2, ya que podría meter presión a los precios mundiales del gas y el crudo./Agencias-PUNTOporPUNTO

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