El pasado 26/12/14 a las 18:24 a través de la cuenta @yohaliresendiz publiqué el siguiente tuit-denuncia:
«@yohaliresendiz: @Heliodoro_hcde de @Infonavit Sur-Sureste y Ex Diputado #PRI regala a su hijo Porsche de 90000 USD @anticorrupcion_ » y adjunte una fotografía en el que se observa a un joven con gafas oscuras y camisa blanca manejando un precioso pero ostentoso auto deportivo amarillo.
Nadie dice que un padre no pueda ni tenga el derecho ni los recursos para regalarle un auto a su hijo. Pero, en este caso, no es cualquier padre sino un funcionario público. Y en este país, como cualquier otro, los funcionarios públicos deben explicar de dónde provienen sus excesos quieran o no.
Un día después de mi tuit-denuncia, el periódico Reforma publicó una entrevista con el funcionario expuesto, es decir Heliodoro Díaz, aquí parte de la publicación.
«Cd. de México, México (27 diciembre 2014).- Heliodoro Díaz, delegado del Infonavit para la zona sur del País, presentó este sábado su renuncia al cargo tras el escándalo del Porsche.
En entrevista con REFORMA aseguró que el vehículo deportivo no es de su propiedad ni de su hijo y que sólo se trató de una broma.
«Ese auto no es mío, no es de mi hijo, fue una broma, pasó por una cochera y se subió. Me dijo: ‘papá, mira mis reyes’, y le dije ‘sí mijito qué bueno que te llegaron mis reyes’ y punto», dijo.
«No tengo nada qué ver, el carro no es mío, no es de mi hijo, nadie me lo regaló, fue una tontería, pero si esas tonterías las ponemos en primera plana pues.»
Habrá que aclararle a Heliodoro Díaz que este auto no es ninguna tontería y un exceso así merece toda la atención no sólo ciudadana sino de las autoridades.
Horas después, en su cuenta de twitter, Heliodoro Diaz publicó
27/12/14
15:04
«@Heliodoro_hcde: No tenia idea que fuera un ciudadano tan importante para las redes. No es mi carro. No es de mi hijo . No lo regale . No preguntaron»
Pero vayamos por partes….
¿Cómo explicar que hace varios días Heliodoro Carlos Antonio Díaz Aguirre, subdirector Jurídico de Liconsa, Oaxaca (aunque realmente toma decisiones como Director Jurídico) y parte fundamental del programa gubernamental «Cruzada contra el hambre» e hijo de Heliodoro Diaz, llega a su trabajo en ese lujoso auto?
¿Cómo explicar, qué carajitos hace en el estacionamiento de casa de su hijo, el lujoso Porshe y detrás de el, un bellísimo y lujoso BMW Azul, propiedad de Heliodoro Díaz?
«Lo que se publicó es verdad, todos lo hemos visto, todos reconocen que es su auto y todos estamos muy indignados. Él, se ha encargado de contarnos que ese Porsche Cayman S 3.4 con transmisión PDK amarillo ha sido un regalo de su padre. Somos un país con más de 53 millones de personas pobres y estamos hartos que todos los días la sociedad sea víctima del cinismo de los funcionarios públicos al exhibir todo lo que tienen, todo lo que logran por corruptos o ladrones y encima de eso nos restrieguen sus excesos con total burla y falta de respeto, esto ya es inaceptable, ya basta, tenemos que denunciar estos atropellos y exigir que esto, no continúe» dice en entrevista para periodismoatodaprueba.blogspot.com un empleado de Liconsa que ha contactado a esta reportera para asegurar y corroborar que sí es cierta la información aquí expuesta.
Y sí…..Heliodoro Díaz dice la verdad cuando explica que no es SU CARRO.
Y sí…Heliodoro Díaz es honesto cuando dice que NO TENÍA IDEA que fuera un ciudadano importante para las redes.
Y sí…. Heliodoro Díaz, tiene razón cuando aclara que ese auto, él NO se LO COMPRÓ a su hijo.
Y sí….aunque Heliodoro Díaz diga: «Yo no podría comprar un auto así», quizá si podría haberlo comprado a crédito porque como coordinador regional sur del Infonavit recibe un sueldo mensual de 139 mil pesos, mientras que su hijo como «subdirector» jurídico corporativo de Liconsa, recibe un salario mensual de 95 mil 354 pesos, si juntan ambos sueldos quizá si podrían comprar un auto así.
¿O quizá…..es un auto a cambio de una transacción exitosa por un complejo habitacional muy muy pero muy grande en el Estado de Morelos y el Porsche fue un regalo de agradecimiento no Sr. Díaz?
¿Y, de su precioso y lujoso BMW Azul convertible ni hablamos, verdad?
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