En materia de acciones para atajar el cambio climático, México reprueba y está lejos de cumplir con los compromisos adquiridos a nivel internacional, lamentan especialistas.
- El investigador de la UNAM Fernando Aragón Durand recuerda que cuando el País firmó el Acuerdo de París en 2015, dentro de la Convención Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático, se comprometió a reducir el 22 por ciento de sus emisiones para 2030.
- Si ya entonces se cuestionaba su capacidad para lograr la meta, al día de hoy la expectativa no es para nada optimista, en especial por la política de petrolización, uso de carbón y planes de refinación por los que ha apostado el Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
- “Es ir en sentido contrario, en contra de todo lo que se ha comprometido México. Pero además estamos perdiendo tiempo, estamos destinando recursos mal; debemos de diversificar la matriz energética, apostar por energías limpias, renovables, que se esperaría que ese fuera el centro de la política energética en México”, señala Aragón Durand.
La bióloga Julia Carabias pone el énfasis en la responsabilidad ética por un medio ambiente sano, el cual es un derecho constitucional.
“No puede ser que nosotros nos estemos escudando en que como tenemos hidrocarburos y queremos ser autosuficientes en gasolina, pues retrasamos nuestra aportación. Eso no es correcto”, sostiene. “Siento que no estamos cumpliendo ni con las leyes mexicanas; existe la Ley General de Cambio Climático, que está diciendo claramente metas, y esas metas las vamos a violar”.
México, reprobado en lucha contra cambio climático
México es el país peor evaluado de América Latina en lo que respecta a acciones implementadas para combatir el cambio climático. Su calificación general fue “Muy Insuficiente” en el ranking elaborado por Climate Action Tracker (CAT).
- El estudio evaluó una serie de variables de 37 países y México se colocó entre los 10 peor evaluados a nivel global y el de calificación más baja en América Latina debido a sus deficientes políticas y compromisos climáticos.
- Sobre las “Contribuciones Nacionalmente Determinadas” (NDC, por sus siglas en inglés) CAT evaluó a México como “críticamente insuficiente” ya que tiene una acción mínima o nula ante el límite de temperatura de 1.5 °C fijado en el Acuerdo de París de 2016.
“El objetivo de México no se ajusta a ninguna interpretación de un enfoque justo para cumplir con el límite de 1.5 °C. Si todos los países siguieran el enfoque de México, el calentamiento superaría los 4 °C”, apuntó el informe.
- México presentó su NDC actualizada el 30 de diciembre de 2020, pero sus objetivos, tanto condicionales como incondicionales, se mantuvieron sin cambios, mientras que sus proyecciones de emisiones bajo la modalidad de negocio habitual (BAU) continúan aumentando.
Además, la política energética del país también lo llevó a tener una baja calificación. “En medio de la pandemia, la Secretaría de Energía de México publicó un proyecto de ley (acelerado debido a la Covid-19) que detendría efectivamente la inversión privada en energía renovable en el país, dando prioridad a las antiguas plantas de energía que funcionan con combustibles fósiles”, dijo CAT.
Las personas especialistas indicaron que el gobierno de México está dando un paso atrás en el sector energético por favorecer los combustibles fósiles y se criticó la construcción de la nueva refinería Dos Bocas y la nueva asignación presupuestaria para la “modernización” de centrales eléctricas de carbón, diesel, gas y petróleo, algunas de las cuales la administración anterior ya había programado para su retiro.
¿Cuál es la importancia del financiamiento climático en México?
De acuerdo con expertos, el cambio climático se atribuye a la actividad humana que afecta la composición de la atmósfera mundial y contribuye a la fluctuación natural del clima observada durante períodos de tiempo similares, ya sea directa o indirectamente. El calentamiento global también amenaza varios derechos humanos básicos, incluido el derecho a la vida, el derecho a la seguridad personal, el derecho a una alimentación suficiente, el derecho al agua, el derecho a la salud, el derecho a una vivienda digna y el derecho a la autodeterminación.
De acuerdo con el Comité Permanente de Finanzas de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático, el financiamiento climático busca -entre otras cosas- reducir las emisiones y mejorar los sumideros de gases de efecto invernadero, además de reducir la vulnerabilidad y mantener e incrementar la resiliencia de los sistemas humanos y ecológicos ante las externalidades negativas derivadas del cambio climático.
- Los gobiernos e instituciones y agentes financieros deben ofrecer financiamiento para fortalecer las medidas de adaptación y mitigación del cambio climático. Dichas medidas pueden costar miles de millones de dólares, lo que las coloca fuera del alcance para regiones o países menos desarrollados que emiten menor cantidad de gases de efecto invernadero en comparación con regiones o países desarrollados. Como resultado, a medida que el ritmo de las negociaciones climáticas globales se acelera durante este año, el dinero ha surgido como un posible obstáculo.
Estos problemas tienen ramificaciones que afectan de manera desproporcionada a quienes viven en la pobreza, la marginación y la vulnerabilidad. México es extremadamente susceptible a esto debido a una serie de circunstancias, la más notable siendo su ubicación física intercalada entre dos mares. Diferentes eventos meteorológicos han venido afectando a nuestro país con creciente regularidad, con importantes consecuencias sociales, ambientales y económicas.
- Ante este panorama, en 2015, México -junto con prácticamente todos los gobiernos- se comprometió mediante el Acuerdo de París de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) a adoptar medidas agresivas de mitigación del cambio climático mediante el aumento de la capacidad de adaptación a los efectos adversos del calentamiento global y a la promoción de la resiliencia climática y el desarrollo con bajas emisiones de gases de efecto invernadero. Para México, limitar los aumentos de temperatura y alinearlos con el objetivo global de adaptación global podría mejorar su resiliencia y minimizar su susceptibilidad al cambio climático.
Para 2030, se espera que los costos de adaptación sean de dos a tres veces mayores que las proyecciones globales actuales, y de cuatro a cinco veces mayores para 2050. Para lograr este objetivo es fundamental garantizar que los flujos financieros estén alineados con un modelo de desarrollo resiliente y emisiones mínimas de gases de efecto invernadero. Para ayudar a las naciones pobres a implementar sus acciones y lograr un equilibrio entre la mitigación y la adaptación, se requiere la formulación e implementación de planes sólidos financieros que integren factores ambientales y sociales en la colocación de activos./Agencias-PUNTOporPUNTO