Con la celebración del 211 aniversario de la independencia, no sólo se conmemora a un México ajeno a sus conquistadores españoles, sino también trae consigo una enorme y espectacular fiesta en la explanada del Zócalo de la capital. A lo largo de la historia, los presidentes han gastado exorbitantes sumas de dinero en dicha festividad.
El sexenio en turno se ha caracterizado por llevar a cabo una falsa austeridad republicana, toda vez que durante la primera celebración a cargo de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) gastó 13.5 millones de pesos que fueron pagados en dos montos importantes: 9.5 mdp por la cena, adornos, equipo de audio, escenarios e iluminación y otros 4 mdp por la Verbena Popular, esto se refiere a la presentación de artistas que se realizó en la Plaza de Constitución.
Dicho evento contó con los shows de la Original Banda El Limón de Salvador Lizárraga, Eugenia León y la Banda Cecam Mixe, las cuales, de acuerdo con el presidente López Obrador no cobraron; sin embargo, sí requirieron de la instalación de tres escenarios, equipos de audio y video.
El costo del montaje de estos escenarios y de la renta del equipo fue de 8,972,046 pesos, en lo que se incluyen también requerimientos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y del Centro de Producción de Programas Informativos y Especiales (Cepropie) que es encargado de grabar los eventos públicos del presidente de la República.
En su primer año como Jefe del Ejecutivo, el festejo de Peña Nieto costó al erario 17 millones 422 mil pesos; mientras que en 2014, su precio subió más de un 20 por ciento y para 950 invitados, se gastaron 18 millones 996 mil pesos. Asimismo, no sólo las lujosas cenas y las largas lista de invitados eran lo que caracterizaban las celebraciones del priísta, pues cada año, los costosos vestidos que portaba su entonces esposa deban de que hablar entre el pueblo mexicano. Uno de los más costosos fue el de la celebración de 2013, Angélica Rivera se mostró con un diseño del tapatío Benito Santos, un vestido largo de encaje en color verde bandera y de un costo de 120 mil pesos.
En su primer festejo, el panista Felipe Calderón ofreció una cena para 2 mil 300 invitados y erogó 21 millones 987 mil pesos en la celebración.
Además, el festejo en el Zócalo la amenizaron El Recodo y K-Paz de la Sierra entre ambos cobraron poco más de 5 millones de pesos por una hora de concierto.
Para 2011 y 2012, Calderón Hinojosa decidió ser más cauto y erogó recursos por 12 millones 65 mil pesos y 13 millones 792 mil pesos, de acuerdo con datos proporcionados a este espacio periodístico.
El año pasado, debido a la pandemia sanitaria por COVID-19, el Zócalo capitalino estuvo vacío. El 210 aniversario de la Independencia tuvo un costo de 12 millones 710 mil 440 pesos, monto superior al que se destinó el año pasado que fue de 9.5 millones de pesos.
En el contrato 2373820 de la Oficina de Presidencia de la República bajo el nombre “Servicio integral para la organización del evento de Conmemoración del 210 Aniversario del Grito de Independencia de México” detalla que de nueva cuenta, como ha ocurrido en la mayoría de los eventos del presidente Andrés Manuel López Obrador, el contrato le fue otorgado en adjudicación directa a Yazmín Adriana Bolaños López.
Y este año, la historia se repitió con montos más elevados para celebrar otra «fiesta para dos», que en breve se darán a conocer con más detalle.
Cabe señalar que la periodista y cónsul de México en Estambul, Turquía, Isabel Arvide Limón, generó un escándalo en redes sociales debido a que mencionó al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) junto a las y los héroes insurgentes durante la tradicional arenga.
Y es que durante la celebración de la Independencia de México en el país bicontinental, Arvide entonó su declamación con entusiasmo; sin embargo, frente a todos los presentes decidió incluir al mandatario mexicano y gritar “Viva Lopez Obrador”.
La grabación rápidamente se viralizó en Twitter y Facebook; no obstante, en la cuenta oficial de la diplomática fue editada la controversial frase, situación que fue también criticada por las y los internautas.
Minutos después de que el nombre de la cónsul se volvió tendencia, ella decidió mostrar su posicionamiento, aunque no directamente, del porqué mencionar al jefe del Ejecutivo mexicano, pese a las críticas que inundaron internet.
De acuerdo a lo que escribió en su cuenta de Twitter, la periodista expresó que ella siempre se ha alejado de la “tibieza”, puesto que ha decidido tener sus convicciones y definiciones claras. Dando a entender que el acto que realizo durante la arenga representa su posición política y social.
“Hay quienes deciden vivir en la tibieza, navegando entre convivencias. Yo decidí vivir la mía entre convicciones y definiciones. Así he vivido cada día, de cara a todos los espejos”, redactó en su cuenta oficial de Twitter.
No fue su único posicionamiento escrito, también decidió citar el texto del comunicador Nacho Rodriguez, en donde él refirió que un “viva” debería de darse a la Cuarta Transformación y a los proyectos que se han impulsado desde el 1º de diciembre de 2018.
“VIVA LA CUARTA TRANSFORMACIÓN! VIVA EL AIFA! VIVA EL TREN MAYA! VIVAN LOS APOYOS SOCIALES! VIVA LA UIF! VIVA EL LOZOYAZO! VIVAN LAS BENDITAS REDES! VIVA MEXICO!!”, escribió en su cuenta de Twitter el también youtuber.
A lo cual Arvide Limón señaló: “Yo grité López Obrador”. Sin duda, nuestro país tiene una representante diplomática en Turquía que da verdadera pena ajena y para no variar, sin ninguna experiencia en ese ámbito profesional.
Y para no dejar fuera la celebración de anoche, en punto de las 22:54 horas dio inicio la ceremonia en Palacio Nacional frente a una vacía Plaza de la Constitución en la Ciudad de México, desde donde Andrés Manuel López Obrador encabezó su tercer tradicional Grito de Independencia. O mejor dicho, su segunda «fiesta para dos».
Un integrante de las Fuerzas Armadas dio por iniciadas las actividades con un toque marcial, y después, junto a la investigadora Beatriz Gutiérrez Müller, dieron paso al salón donde cadetes mexicanos hicieron entrega de la respectiva bandera de México.
Sin embargo, el presidente y Gutiérrez Müller guardaron también un minuto de silencio por todas las personas que han perdido la vida durante la pandemia por COVID-19 en la entidad, que ya suman 269,912 defunciones hasta el 15 de Septiembre.
Un desgarbado Andrés Manuel López Obrador, pero eso sí, vestido con un traje de la marca Hugo Boss que le costó 45 mil pesos, –y eso que pregona la austeridad republicana- portó esta insignia durante el festejo del Grito de Independencia desde uno de los emblemáticos balcones de Palacio Nacional con vista al Zócalo Capitalino, dado en punto de las 23:00 horas.
“Mexicanos, viva la Independencia; Viva Miguel Hidalgo y Costilla; Viva José María Morelos y Pavón; Viva Josefa Ortiz de Domínguez; Viva Ignacio Allende; Viva Leona Vicario; Viva Vicente Guerrero; Vivan los Héroes Anónimos; Viva la libertad; Viva la justicia; Viva la igualdad; Viva la democracia; Viva la honestidad; Viva nuestra soberanía; Viva la fraternidad universal; Viva el amor al prójimo; Vivan las culturas del México prehispánico; Viva México. Viva México. Viva México”, fueron las palabras del jefe del ejecutivo federal.
En la Plaza de la Constitución, honorando los 500 años de resistencia indígena, yacía la maqueta réplica del Templo Mayor, primero a oscuras, y luego iluminada para recitar la historia de la fundación de la ciudad a través de leyendas mexicas en los últimos cinco siglos.
Esta reproducción se inspiró en el Huey Teocalli y consta de cuatro niveles: la primera base conocida como Tzompantitlán, lugar de las calaveras, seguido de Coaxalpan o lugar arenoso de las serpientes, el tercer nivel es Apetlac, el petate del agua, y además contará con dos escalinatas, una de cada lado, hacia la cima donde están dos capillas, una dedicada a la deidad Tláloc en color azul y otra para Huitzilopochtli en color rojo.
Luego de la ceremonia, tuvo lugar un vistoso y por supuesto costos espectáculo de luces en los techos de los representativos edificios que rodean al Palacio Nacional, así como algunos fuegos pirotécnicos que iluminaron la Ciudad de México.
Y entonces apareció también la cantante Lila Downs en un pequeño escenario montado en el Zócalo de la Ciudad de México. La intérprete hizo gala al cantar “Latinoamérica”, canción de Calle 13.
Por su parte, la doctora en teoría literaria por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), en su papel de «la no primera dama» vistió un conjunto exclusivo a dos piezas que constaba de una falda larga y una saco color azul de la carísima marca Calvin Klein con detalles florales en los hombros y mangas, los cuales estaban bordados y fueron de color blanco. Cuyo costo fue de 70 mil pesos.
Asimismo, Beatriz Gutiérrez Müller lució el cabello completamente recogido con unos aretes blancos y un maquillaje discreto. Hasta el momento, no se han dado a conocer más detalles de su atuendo ni el de su esposo. Por algo será.
APUNTES FIDEDIGNOS
Curiosamente, en 12 de las 16 alcaldías de la Ciudad de México no se efectuó la celebración de estas fiestas patrias en sus respectivas explanadas, sino que todo lo hicieron de forma virtual por aquello de la pandemia provocada por el Covid-19.
Tres de las alcaldías no informaron si iban a realizar sus festejos, de manera virtual o presencial, aunque en Cuajimalpa, el alcalde Adrián Rubalcava Suárez si realizó la celebración en vivo y sin importarle la situación sanitaria…a lo mejor piensa que es inmune o de seguro López Obrador le regaló unas «estampitas» o lo ungió con la famosa «fuerza moral»…mientras esto sucede…¡¡¡seguiremos informando!!!
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