Los gobernadores salientes de ocho entidades, que próximamente serán controlados por Morena, incrementaron la deuda pública a lo largo de su mandato; entre ellos destacan los casos de Baja California, Colima y Sonora donde se registran aumentos superiores al 20 por ciento
- De acuerdo con informes de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), a esos estados le siguen Guerrero, con un aumento de 16.5 por ciento; Michoacán con 16.8 por ciento; Nayarit, con 3.3 por ciento; mientras que en el caso de Zacatecas y Campeche las subidas de la deuda fueron menores a un punto porcentual. Por el contrario, en Sinaloa, durante la administración de Quirino Ordaz, las obligaciones financieras cayeron 13.9 por ciento y en Baja California Sur cayeron 5 por ciento.
- El caso de Tlaxcala resulta peculiar porque se mantiene como la única entidad federativa sin reportar deuda pública. Un estudio del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados (CEFP), señala que hasta el primer trimestre de 2021 el promedio de la deuda pública que se maneja en las entidades federativas es de 19.7 mil millones de pesos y solo tres de los estados que gobernará Morena se ubican por arriba de la media.
- El caso de Sonora sobresale por el monto de la deuda total estatal, ya que las cifras de la SHCP revelan hasta marzo pasado los saldos a pagar ascendían a 28 mil 100 millones de pesos, lo que representa un aumento de 23.4 por ciento en comparación con los 22 mil 780 mdp con los que inició el gobierno de la priista Claudia Pavlovich.
Ante esta situación el hoy gobernador electo del estado, Alfonso Durazo, prometió en su campaña electoral que durante su administración estabilizaría las finanzas del gobierno que “actualmente se encuentra en bancarrota” y en mayo pasado destacó existen adeudos con proveedores que ascienden entre 4 mil y 8 mil millones de pesos.
Por su parte, los cálculos del CEFP señalan que 53 por ciento de las obligaciones financieras son con la banca múltiple, mientras que 45 por ciento están con la banca de desarrollo y el 2 por ciento restante se divide en emisiones bursátiles u otros esquemas de financiación.
- En Baja California la gobernadora electa, Marina del Pilar Ávila, recibirá de su compañero de partido, Jaime Bonilla Valdez, un estado con una deuda pública de 20 mil 900 millones de pesos, la cual en casi dos años de mandato creció 20.1 por ciento con respecto a los 17 mil 400 millones de pesos con los que se contaba en noviembre de 2019.
Dicha entidad experimentó un ritmo vertiginoso de endeudamiento al promediar obligaciones financieras por un monto promedio diario de 7.3 millones de pesos desde que Bonilla se hizo con el cargo de gobernador.
Por tal motivo en el primer trimestre del año la calificadora HR Ratings otorgó una calificación de nivel BBB+ con una perspectiva negativa porque el gobierno estatal debía liquidar la deuda a corto plazo que ascendía a 3 mil 700 millones de pesos previo al cambio de administración, lo “que continuará presionando la liquidez del Estado”.
La composición de la deuda pública en Baja California se reparte con 56 por ciento a la banca múltiple, 41 por ciento a la banca de desarrollo y el 3 por ciento restante a emisiones bursátiles y ortos esquemas de financiación.
- El caso de Colima resalta porque las obligaciones financieras del gobierno estatal aumentaron 32.6 por ciento en el último sexenio, lo que representa el mayor porcentaje entre los 15 estados que cambiarán de gobernador en los próximos meses.
- Los reportes de la SHCP señalan que el gobierno estatal cuenta con una deuda pública de 4 mil 300 millones de pesos hasta el 31 de marzo pasado, mientras que en febrero de 2016, cuando el priista José Ignacio Peralta tomó posesión, el saldo era de 3 mil 243 millones de pesos.
En el estado de Guerrero la deuda del gobierno estatal pasó de 2 mil 831 millones de pesos en octubre de 2015 a 3 mil 300 millones en marzo pasado. En lo que respecta a Michoacán los saldos revelan un adeudo de 20 mil 400 millones y en Nayarit las obligaciones financieras son de 6 mil 300 millones de pesos. Los casos de Zacatecas y Campeche muestran crecimientos apenas marginales.
- En la primera entidad la deuda apenas creció 75,8 millones de pesos en el último sexenio, por lo que el morenista David Monreal recibirá la gubernatura con un adeudo total de 7 mil 900 mdp.
- En Campeche las cuentas públicas revelan las obligaciones financieras del gobierno estatal ascienden a 2 mil 800 millones de pesos, una cantidad apenas superior por 12 mdp a lo que se registró en junio de 2019.
Las únicas entidades que rebajaron el saldo de la deuda fueron Baja California Sur y Sinaloa. En la primera entidad las obligaciones financieras cayeron 1.3 por ciento, mientras que en la segunda lo hicieron en 13.4 por ciento.
Gobernadores salientes dejan regalito a sucesores
En 5 de los 15 estados en donde recientemente hubo elecciones, los gobernadores salientes heredaron una deuda más alta de como la recibieron: Baja California, con un crecimiento de 35.9 por ciento real; Sonora, con un alza de 5.8 por ciento; Nayarit, con 1.4 por ciento; Colima, 0.2 por ciento y Nuevo León, 1.8 por ciento, establecen indicadores de la Secretaría de Hacienda.
- Otras ocho entidades lograron bajar sus pasivos en términos reales: Michoacán con una disminución de 11.3 por ciento; Sinaloa 16.7, Chihuahua 19.2; Campeche 11.5; San Luis Potosí 26.3; Zacatecas 25.5; Baja California Sur 31 y Guerrero 51.7.
- Cinthya Rocha, directora de finanzas públicas de Aregional y María del Carmen Martínez Richa, vicepresidente analista de Moody’s, destacaron que una mención aparte merecen dos entidades que dejaron sus pasivos en cero: Querétaro, por una decisión del gobernador saliente de prepagar los pasivos eliminó toda su deuda, y Tlaxcala, cuya Constitución le prohíbe tomar deuda de largo plazo.
El gobernador saliente de Querétaro, Francisco Domínguez, hizo un esfuerzo por actualizar el padrón catastral y mejorar el cobro de predial y otros impuestos locales, así como para obtener ahorros que le permitieron adelantar su pago de deuda.
- Las expertas precisaron que para los estados donde la deuda les representa un problema, no tiene que ver con el monto en números absolutos, sino con el flujo de ingresos, ya que por ejemplo Nuevo León registra el pasivo más alto entre las 15 entidades comparadas, al sumar 49 mil 785 millones de pesos, pero su economía es muy dinámica y tiene ingresos que la hacen manejable.
En contraste, subrayó Rocha, Guerrero que tiene la deuda más baja de las 15 entidades, de mil 412.9 millones de pesos, enfrenta presiones importantes e incluso el nuevo gobierno planea contratar deuda de corto plazo por casi mil 850 millones de pesos, precisamente para hacer frente a la nómina y los aguinaldos de cierre de año.
Martínez Richa explicó que un buen parámetro de medición consiste en comparar el tamaño de la deuda de cada entidad con respecto a sus ingresos operativos, (participaciones e ingresos propios) y bajo esta métrica, destaca que Nuevo León ha mantenido muy estable su deuda, sí la ha elevado cada año, pero comparada con sus ingresos se mantiene alrededor del 100 por ciento de sus entradas. Ha contratado unos 2 mil o 3 mil millones de pesos de deuda al año, pero es muy manejable.
Añadió que en el caso de Sonora, su nivel de deuda bajó de 79 por ciento de sus ingresos operativos en 2016 a 68.4 por ciento en 2020.
Meten disciplina
Las expertas coincidieron en que luego de la entrada en vigor de la Ley de Disciplina Financiera en 2016, la deuda de los estados ha crecido muy poco, en promedio en los últimos 5 años ha aumentado entre 4 y 5 por ciento.
Explicaron que la Ley exige a los gobernadores pagar los pasivos de corto plazo en los últimos tres meses antes de irse, por lo que en el primer semestre de este año, las deudas de las entidades que tuvieron elecciones se redujeron.
- La experta de Moody´s expuso que las entidades con baja liquidez enfrentaron problemas para acatar esta disposición de la Ley, y algunos estados sufrieron por la pandemia.
- Rocha afirmó que los nuevos gobernadores que recibirán a sus entidades con niveles de endeudamiento de largo plazo más elevados serán Nuevo León, Chihuahua, Sonora, Michoacán y Baja California.
Pero las entidades que estarían en apuros de liquidez son Baja California y Nayarit, que tienen un uso recurrente de pasivos de corto plazo. Otros estados con problemas de liquidez son Michoacán, Campeche y Guerrero.
“Nayarit en 2020 se declaró en bancarrota, por incumplimiento de pago de sus obligaciones de financiamiento y en 2021 liquidaron los créditos de corto plazo gracias al anticipo de participaciones federales”, recordó.
Las expertas destacaron que la Ley de Disciplina fiscal ayudó a evitar problemas de sobreendeudamiento o de insolvencia.
Suman 20 municipios 43% de deuda global
Los estados de Baja California, Jalisco, Nuevo León, Sonora, México y Quintana Roo concentran 20 de los municipios más endeudados del País.
- El documento Obligaciones Financieras de los Municipios, elaborado por el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas, indica que al cierre de 2020 estos municipios englobaban más del 43 por ciento de la deuda municipal, que ascendía a 43 mil 462.9 millones de pesos.
- Las cifras indican que, en conjunto, los pasivos de estos ayuntamientos son superiores a los 18 mil 897 millones de pesos.
- Se trata de Tijuana, Mexicali y Ensenada, en Baja California, con una deuda total de 4 mil 125.9 millones de pesos, así como Guadalajara, Zapopan, Tonalá y San Pedro Tlaquepaque, en Jalisco, con una deuda conjunta de más de 3 mil 990 millones de pesos.
En el Estado de Nuevo León, los municipios de Monterrey, San Nicolás de los Garza y Guadalupe suman pasivos por 3 mil 446.7 millones, mientras que Hermosillo, Cajeme y Nogales, en Sonora, registran una deuda conjunta de 2 mil 973.9 millones.
- Los ayuntamientos de Naucalpan, Ecatepec, Atizapán de Zaragoza y Tlalnepantla de Baz en el Estado de México presentan una deuda de 2 mil 331.8 millones, en tanto que para Benito Juárez, Solidaridad y Cozumel, en Quintana Roo, ésta es de 2 mil 28 millones de pesos.
Aunque representan apenas el 3.2 por ciento de los 620 ayuntamientos que cuentan con pasivos registrados ante la Secretaría de Hacienda, esos 20 municipios concentran el 43.5 por ciento de la deuda total municipal.
- De acuerdo con el informe, las localidades más endeudadas son Tijuana, Baja California, con 2 mil 597.6 millones de pesos; Monterrey, Nuevo León, con mil 961.7 millones; Hermosillo, Sonora, con mil 764.4 millones; Guadalajara, Jalisco, con mil 695.6 millones de pesos; León, Guanajuato, con mil 56 millones y Zapopan, Jalisco, con mil 8 millones de pesos.
- Esos municipios representan el 0.9 por ciento de los que cuentan con deuda registrada ante la Secretaría de Hacienda, pero concentran prácticamente una cuarta parte del total de pasivos de este orden de Gobierno.
El coordinador de Finanzas Públicas Locales del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CRIÉ), Christopher Cernichiaro, advirtió que si bien la Ley de Disciplina Financiera representó un avance, al establecer los criterios generales de responsabilidad hacendaria y financiera que regirán a estados y municipios, aún es necesario establecer más controles para garantizar que la deuda no sea destinada a rubros de gasto de baja rentabilidad económica y social.
Cernichiaro advirtió que estos controles deben considerar eventualidades, como la crisis sanitaria actual o desastres naturales.
«(Con más controles) sí vamos a tener una forma de generar certeza de a qué se van a dedicar los recursos, pero se me viene a la cabeza una situación como la pandemia; podría ser complicado que por tener muchos candados para el ejercicio de la deuda, no pudieras satisfacer las necesidades de forma inmediata, eso es algo a tomar a cuenta», consideró./Agencias-PUNTOporPUNTO
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