A pesar de tener un avance inusitado en el poder político del país, pues en sólo unos años se convirtió en la primera fuerza política de México, Morena todavía no ha logrado “generar vida orgánica, vida institucional, vida disciplinaria. No hemos logrado en Morena todavía establecer mecanismos que permitan la discusión de manera institucional. Todavía no termina de institucionalizarse su vida partidaria”, asegura Ricardo Monreal Ávila.
- Monreal, uno de los fundadores del partido y que hoy recuerda los motivos que lo llevaron a confrontar al entonces poderoso PRI cuando le negó la posibilidad de ser candidato a gobernador de Zacatecas, asegura que “ahora con la experiencia acumulada con los años, yo afirmo que hice lo correcto al no permitir una imposición o una exclusión en el PRI en 1997, hace 23 años, y yo estoy seguro que aprendida la lección por los partidos, en este caso por Morena, no se cometerá el mismo error”, dice.
El viernes pasado, 9 de julio, Morena cumplió siete años de existencia como partido político, creado de una escisión de gran parte de los militantes del PRD y la suma de integrantes de otros partidos, principalmente del PRI, y aunque su crecimiento electoral fue vertiginoso, pues en sólo cuatro años logró colocarse en el primer lugar de las preferencias electorales en todo el país, desde el año pasado comenzó a registrar problemas internos severos, primero en relación al relevo de su dirigencia nacional y después por el reacomodo de grupos de poder en torno a quienes aspiran a más poder político.
- Desde su nacimiento Morena ha estado dividida en dos grandes grupos: radicales y moderados. Los radicales se autodenominan “los puros”, porque dicen que siempre han estado en las filas de la izquierda y pasaron del PRD a Morena, igual que su líder, el presidente Andrés Manuel López Obrador. Los moderados tienen historia en otros partidos políticos, pero iniciaron en el PRI y han sido gobierno en distintas ocasiones.
- Pero a raíz de los resultados electorales del 6 de junio, la división interna se agudizó, porque los puros o radicales ahora están ubicados en tres grandes subgrupos; mientras que los moderados se ubican en dos grandes subgrupos.
En esa geografía interna, el Presidente de la República dio el banderazo de salida a su propia sucesión presidencial, lo que provocó el reacomodo interno de los morenistas, de acuerdo con el relato que los propios militantes del partido compartieron con Excélsior.
Excluido hasta ayer de la lista presidencial de los posibles sucesores, Ricardo Monreal se prepara para afrontar la pugna interna para ser el candidato presidencial de Morena y a pregunta expresa de si el morenismo es tan fuerte como lo fue el PRI al que enfrentó y ganó en los noventa, Ricardo Monreal asegura que “no sé si sea tan fuerte como el PRI, Morena ahora; lo que sí sé es que es una renovada esperanza en el movimiento.
“Creo que Morena surge de un movimiento social espontáneo, pero con un gran vigor, con una gran dinámica; que esto lo ha llevado a no generar vida orgánica, vida institucional, vida disciplinaria”, resalta./CONGRESO-PUNTOporPUNTO