Las gigantes farmacéuticas son inmunes a la incertidumbre que ha provocado la eficacia de algunas de sus vacunas contra Covid-19, pues según datos de mercado, su valor bursátil continúa en aumento. Desde el inicio de la pandemia a la fecha, estas empresas acumulan una ganancia de 152 mil millones de dólares, es decir, poco más de 3 billones de pesos.
Para poner en contexto, este beneficio es tres veces lo que el gobierno mexicano gasta anualmente en el pago de pensiones, que de acuerdo con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público es de un billón de pesos.
La suma también es más de cuatro veces superior a los 660 mil millones de pesos presupuestados para el sector salud este año, y es casi la mitad de los ingresos totales que se estima tendrá el país este año, que serán 6.2 billones de pesos.
- A inicios de 2020 el valor de mercado de Johnson & Johnson, Pfizer, AstraZeneca, Moderna, Novavax, BionTech y CanSino, siete de las farmacéuticas más grandes del mundo, ascendía a 686 mil 908 millones de dólares, mientras que al cierre del viernes pasado se ubicó en 838 mil 961 millones de dólares.
- En las semanas recientes ha crecido la incertidumbre en torno a las vacunas contra Covid-19, pues algunas de las desarrolladas por dichas farmacéuticas han enfrentado problemas de aprobación en ciertos países, dado que los gobiernos han detectado anomalías e inclusive efectos secundarios en los pacientes que las reciben.
- Lo anterior no ha detenido el impulso del valor bursátil de las empresas, pues apenas el 10 de enero pasado, según un seguimiento de este diario, la ganancia acumulada de las farmacéuticas era de 90 mil millones de dólares, mientras ahora es de 152 mil millones.
Es decir, en menos de tres meses, en medio de un ambiente de cuestionamientos, su valor se ha disparado 70 por ciento, equivalente a poco más de 60 mil millones de dólares.
Johnson & Johnson, la empresa más grande del sector, registra un valor bursátil de 426 mil 477 millones de dólares, 10 por ciento más respecto de los 384 mil 272 millones de dólares que registraba hasta antes del inicio de la pandemia.
El valor de esta farmacéutica abrió 2021 en un nivel de alrededor de 422 mil millones de dólares, mismo que siguió en aumento pese a que recientemente los reguladores federales de salud de Estados Unidos recomendaron una pausa en el uso de la vacuna por detectar casos de coágulos de sangre en mujeres de entre 18 y 48 años.
Pfizer, la segunda firma más grande tenía un valor de 217 mil millones de dólares antes del brote de la pandemia, que alcanzó un pico a finales del año pasado de 235 mil millones, el cual bajó 206 mil millones en enero de 2021, esto luego de que la farmacéutica decidió vender parte de sus acciones para materializar las ganancias.
En cuanto a la vacuna desarrollada por esta empresa, se ha revelado que causa algunos efectos secundarios e inclusive que se necesita una tercera dosis para que sea efectiva, lo cual no ha afectado su valor, pues incluso ha aumentado un poco hasta volver a alcanzar el nivel que tenía hace un año.
- Un caso parecido es el de AstraZeneca, la tercera del mercado, que antes de la pandemia valía 66 mil millones de dólares, mismo nivel que mantiene hasta la fecha pese a que su vacuna ha sido una de las más controversiales al ser suspendida su aplicación por potencias de la Unión Europea y Estados Unidos tras darse muertes sospechosas en pacientes que recibieron la dosis.
Respecto a las demás, Moderna acumula una alza en su valor bursátil de 60 mil 700 millones de dólares, BionTech 27 mil 600 millones, Novavax 8 mil 600 millones y CanSino 6 mil 900 millones de dólares.
OMC pide vacunas equitativas y libres de barreras
Hay un nuevo y discreto protagonista en los esfuerzos para paliar la pandemia por COVID-19 en el mundo: la Organización Mundial del Comercio (OMC). La postura que asuma este organismo internacional podría apoyar la distribución equitativa de las dosis de vacunas que contrarrestan el virus del SARS-CoV-2 entre las naciones.
Ngozi Okonjo-Iweala, nueva directora general de la OMC, no sólo se ha pronunciado en diversas ocasiones por el “acceso equitativo” de los países a la vacuna sino que ha solicitado a los miembros del organismo que dirige reducir las restricciones de exportación y las barreras para las cadenas de suministro; además de enfocarse en facilitar procedimientos logísticos y aduaneros.
- Estamos monitoreando esto como parte de nuestro trabajo regular y continuaremos haciéndolo para aumentar las provisiones y de barreras #ComercioInternacional mantener cadenas de suministro sólidas. Se ha subrayado que el comercio es un factor crítico de la producción; incumbe a los miembros de la OMC actuar.- Ngozi Okonjo-Iweala, Directora general de la OMC
- El enfoque de esta líder nigeriana incluso le ha valido señalamientos toda vez que tradicionalmente los líderes de la OMC se concentran en ser especie de mediador entre los países miembros para generar acuerdos o resolver conflictos comerciales.
- La atención de la líder de la OMS en el proceso de distribución de las vacunas no es fortuito, la nigeriana con más de 30 años de experiencia en organismos internacionales y puestos ejecutivos en materia de finanzas presidió hasta diciembre de 2020 la Alianza para la Vacunación (GAVI, por sus siglas en inglés), que se enfoca en mejorar el acceso a vacunas nuevas y subutilizadas para los niños que viven en los países más pobres del planeta.
La exención temporal de las reglas de propiedad de la OMC es una medida fundamental para garantizar que se compartan abiertamente los conocimientos y la tecnología de las vacunas y con ello apoyar para poner fin a la pandemia, aseguran laureados con el premio Nobel y ex jefes de Estado que dirigieron una carta al gobierno de Joe Biden para alentar estas medidas.
“Estas acciones ampliarían la capacidad de fabricación mundial, sin obstáculos por los monopolios de la industria que están impulsando la grave escasez de suministro que bloquea el acceso a las vacunas. Es posible que nueve de cada 10 personas en la mayoría de los países pobres se queden sin una vacuna este año”, señalan los firmantes de la carta publicada el 14 de abril.
Cálculos elaborados por Oxfam advierten que no habrá vacunas para cubrir a la población mundial hasta 2023 y 2024 y serán los países de bajos ingresos los que tengan que esperar más tiempo para inmunizar a parte de su población con este mecanismo.
36 millones de vacunas se han distribuido en 107 países como parte del mecanismo COVAX
La vacuna no sólo se concibe como uno de los métodos más eficaces para controlar la crisis sanitaria provocada por la pandemia de COVID-19, que hasta la fecha registra más de 138 mil millones de personas infectadas y dos millones 979 mil 170 muertes, sino que, de su aplicación depende el crecimiento económico de las naciones.
Llamado a los fabricantes
Las solicitudes por parte de Okonjo-Iweala no sólo se han enfocado en los países miembros de la OMC, sino también a los fabricantes de la vacuna para que generen medidas para ampliar capacidades de producción, incrementar la transferencia de tecnología y conocimientos técnicos a otros fabricantes, además de transparentar los acuerdos contractuales y precios de los productos.
- Previo a que se empezará a distribuir la vacuna contra el COVID-19 Oxfam advirtió que aunque el trabajo de las grandes farmacéuticas salvará vidas, su tradicional modelo de negocios se ha beneficiado por años del financiamiento gubernamental a sus investigaciones y la canalización de sus millonarias ganancias a manos privadas.
“Este trabajo que salva vidas debe continuar, pero no podemos permitir que las grandes farmacéuticas exacerben aún más la crisis de desigualdad que el COVID-19 ha puesto al descubierto. Esta pandemia se alimenta de la desigualdad, matando a los pobres y los históricamente desfavorecidos a tasas más altas que los ricos y privilegiados”, señaló este organismo en su publicación People over profits: Make COVID-19 Medicines and Vaccines Free and Fair for All./Agencias-PUNTOporPUNTO