Impactada por el alza de los precios de la gasolina, el gas LP, la tortilla y el huevo, la inflación se elevó 0.53% en la primera quincena de marzo, alcanzando una tasa anual de 4.12%, el nivel más alto, no visto desde mayo del 2019, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
- Al interior del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), la inflación subyacente que excluye a los energéticos y productos agropecuarios incrementó 0.35%, con una variación anual de 4.09%.
- Por su parte, la inflación no subyacente que solamente integra a las tarifas autorizadas por el gobierno, los agropecuarios y energéticos, caracterizados por su elevada volatilidad se disparó 1.08%, tocando una tasa anual de 4.19% en los primeros 15 días de marzo.
Los genéricos que más aumentaron sus costos fueron las gasolinas de alto y bajo octanaje con incrementos quincenales de 3.67% y 0.98% respectivamente; gas doméstico LP, 4.05%; tortilla de maíz, 1.79%; huevo, 3.87%; transporte aéreo, 15.8%; tomate verde, 17.3%; loncherías, fondas, torterías y taquerías, 0.33%; limón, 11.22%; y electricidad, 0.72%.
En contraste, disminuyeron los precios del chayote, chile poblano, cebolla, el arroz, plátano, frijol, productos para el cabello, entre otros.
De acuerdo con el análisis del Grupo Financiero Monex con este resultado, se minimizan las probabilidades de que el Banco de México ejecute un nuevo recorte en la reunión de política monetaria de esta semana, pues es posible que la inflación permanezca fuera de rango al menos por tres meses.
Continua las presiones
El avance anual en los energéticos, con 9.45 por ciento, su mayor aumento desde finales de 2018, y en este rubro sobresale el precio del gas doméstico LP, que se disparó 36.0 por ciento anual.
En comparación con la quincena anterior, el aumento en los precios fue de 0.53 por ciento, la cifra más elevada para un periodo similar desde 1998, y muy por arriba del 0.33 por ciento que estimó el consenso de analistas.
Expertos adelantaron que podrían rebasar hasta el 5 por ciento en el corto plazo debido al confinamiento y alzas en los precios de turismo por Semana Santa.
- “El dato de la inflación estuvo por arriba de lo esperado y, en las lecturas de abril podría estar por encima del 5 por ciento, por un efecto estadístico y porque los precios de materias primas como el petróleo y algunos metales y materias primas se han acelerado”, mencionó Alejandro Saldaña, subdirector de análisis económico de Ve por Más.
- Agregó que conforme se vayan disipando estos grandes choques en el verano, “veremos un entorno de bajos niveles de consumo, demanda y de actividad económica; en general la inflación debería de empezar a bajar y corregirse acercándose al 4 por ciento e incluso permanecer por debajo de este nivel”.
“El incremento de la inflación fue una sorpresa al alza muy importante, el elemento más destacado es el aumento en los precios en la parte subyacente sobre todo en los elementos como las mercancías alimenticias, no alimenticias y servicios. Es preocupante porque Banxico tiene más control en la inflación subyacente debido a la influencia en variables como el tipo de cambio”, afirmó Jessica Roldán, directora de Análisis Económico de la corredora local Finamex.
Añadió que en el corto plazo los precios al consumidor seguirán subiendo. “Estamos esperando que entre marzo, abril y mayo, la inflación esté por encima de 4 por ciento e incluso para abril nuestro número es de una inflación anual de 5.25 por ciento, ahora esto es importante porque el principal incremento de la inflación será en la no subyacente sobre todo por los energéticos”.
Repunta índice subyacente
El índice de precios subyacente, que es aquel que excluye de su contabilidad los productos de alta volatilidad de precios, tuvo una variación anual de 4.09 por ciento a tasa anual, su mayor nivel desde la primera quincena de marzo de 2018, cuando se ubicó en 4.15 por ciento.
“Esto refleja en parte aumentos en bienes como ropa y muebles, así como un aumento en los precios de las tarifas aéreas a medida que se levantaron las medidas de bloqueo en todo México”, indicó Nikhil Sanghani, economista para América Latina de Capital Economics.
En su interior, los precios de los servicios se ubicaron en 2.22 por ciento, mientras que el alza en los precios de las mercancías fue de 5.81 por ciento, su nivel más alto desde la primera quincena de enero de 2018, cuando se ubicó en 5.94 por ciento.
- En los alimentos y bebidas el aumento fue de 6.5 por ciento, y de 5.06 por ciento en las mercancías no alimenticias.
- En tanto, la balanza no subyacente, que contabiliza los productos que presentan una alta volatilidad en sus precios, como lo son los productos agrícolas o los combustibles, se ubicó en 4.19 por ciento a tasa anual.
De manera desagregada, los precios de los productos agropecuarios presentaron una variación de 0.07 por ciento, mientras que los de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno se ubicaron en 7.3 por ciento, esto respecto al mismo periodo del año pasado.
- Marcos Daniel Arias, analista de Monex, indicó que las presiones en el subíndice subyacente podrían extenderse y contaminar a las expectativas y los resultados de la segunda mitad del año, por lo que se espera cautela por parte del Banco de México.
En cuanto al índice de precios de la canasta de consumo mínimo, esta registró un alza de 0.57 por ciento quincenal y de 4.81 por ciento anual.
En comparación con la quincena anterior, el incremento generalizado en los precios fue de 0.53 por ciento.
Estímulo fiscal baja el precio de gasolina e inflación
Por su parte Karina Ramírez, titular de la Unidad de Ingresos no Tributarios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), aseguró que la aplicación de estímulos fiscales a la cuota del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) de los combustibles ha contribuido a que disminuya el precio de las gasolinas y diésel, así como la inflación.
- “El estímulo ha contribuido a que los precios de gasolina disminuyan en términos reales, lo cual ha hecho que la inflación anual del índice Nacional de Precios al Consumidor haya disminuido de 4.72 por ciento al inicio de la administración a 3.76 por ciento en febrero de 2021”, sostuvo al participar en la Cátedra SHCP, organizada por la Facultad de Economía de la UNAM.
Indicó que para 2021 se fijó una cuota de IEPS a la gasolina regular de 5.11 pesos por litro, a la gasolina premium de 4.32 pesos por litro y al diésel 5.62 pesos por litro, mismas que se reducen con la aplicación del estímulo fiscal a fin de moderar los cambios en los precios de los combustibles.
- La encargada de firmar todos los viernes los estímulos fiscales en el Diario Oficial de la Federación, señaló que el estímulo funciona como un amortiguador cuando los precios internacionales de referencia se elevan, es decir, el estímulo se activa y el IEPS se reduce.
Con lo anterior -añadió- se mantienen los precios al mayoreo estables, esto es, no se incrementan por encima de la inflación y, por ende, también los precios al público. Apuntó que no se incrementan los precios de la inflación a partir de un precio base que se fijó con los precios de noviembre de 2018./Agencias-PUNTOporPUNTO