Los “saltos” de los diputados de una bancada a otra permitió a la 4T tener una sobrerrepresentación en la Cámara baja, por lo que es un tema que debe revisarse, dijo la diputada Martha Tagle (MC).
Sin embargo, el investigador de la Escuela de Ciencias Sociales del Tec de Monterrey, Gustavo López Montiel, no vislumbra un cambio en esta práctica, porque los políticos no ven a los partidos en términos de lealtad ideológica, sino como canales de acceso a posiciones de Gobierno y así les conviene mantenerlo.
- Tagle mencionó que Morena obtuvo para diputados 21 millones de votos, no 30 millones; pero como muchos de sus diputados venían “etiquetados” para otros grupos parlamentarios al pasarse les permitió la sobrerrepresentación y tener la mayoría absoluta.
- Comentó que la práctica no es ilegal, sin embargo se ha utilizado para otros fines, “más allá del tema del chapulineo, les ha servido a la mayoría y pretendieron también quedarse de manera ilegal con la Mesa Directiva que nos les correspondía”.
- “Son estrategias de tipo político que no tienen nada que ver con la representación de la ciudadanía. Se supone que la gente, cuando vota por una opción política, vota por lo que proponen y que está en sus idearios, y a la hora de la hora, vemos que al interior de las cámaras hacen lo que quieren”, expuso Tagle.
SIN DISCIPLINA PARLAMENTARIA
El profesor-investigador del Tec comentó que el llamado formalmente transfuguismo parlamentario, antes estaba ligado a la disciplina partidaria en la que las candidaturas dependían de los partidos y si el político se movía a otra fuerza política renunciaba a la posibilidad de otro cargo.
“Esta disciplina se debilitó porque los grupos políticos ven a los partidos como un canal para llegar a un espacio de poder, más que como un espacio de competencia política en la que pueden estar en términos ideológicos, eso ya no funciona.
“Los partidos actuales los llamamos partidos cártel, que son partidos que todos están en el Gobierno a algún escala, y que se utilizan por los grupos políticos para llegar a esos puestos de gobierno”, explicó López Montiel.
Antes de que se movieran los legisladores entre partidos, abundó, las estructuras se mudaron, como pasó en el PRI que se fueron a Morena, o del PAN que salieron hacia el PRD, o del PRD también hacia Morena, y estos grupos políticos ven a los partidos como canales para acceder a los Gobiernos.
El investigador enfatizó que no existe un mecanismo donde haya un vínculo entre los ciudadanos y los legisladores, lo que les exime a estos de una rendición de cuentas.
“Le conviene a los políticos mantenerlo así porque les da mucha flexibilidad, y como al final la gente no los castiga, no les retira su voto, por eso es funcional para ellos”./COGRESO-PUNTOporPUNTO